El 16 de abril de 1838 se dio inicio al conflicto de la Guerra de Intervención entre México y Francia, mejor conocida como “Guerra de los Pasteles”. Después de la Guerra de Independencia, varios ciudadanos franceses residentes en la Ciudad de México, entre ellos un pastelero de apellido Remontel, reclamaron la reparación por los daños sufridos en el año de 1828 a causa de los oficiales mexicanos.

Las operaciones de la Guerra de los Pasteles se enmarcan dentro de un intento de obtener privilegios económicos en Hispanoamérica. Como antecedente entre ambas naciones está que en el año de 1827 se celebró un convenio con Francia bajo el nombre de Declaraciones Provisionales, que sentaban las bases para el futuro arreglo de las relaciones entre ambos países.

Al no ser aceptadas las demandas por el gobierno mexicano, la flota francesa abrió fuego contra el fuerte de San Juan de Ulúa y el puerto de Veracruz el 21 de noviembre de 1838, comenzando la guerra entre ambas naciones. El 9 de marzo se firmó el tratado de paz, en el cual México se comprometía a pagar las indemnizaciones y Francia a retirar su flota naval, además de devolver las naves mexicanas incautadas.

El mediador del conflicto fue el inglés Richard Pakenham, quien consiguió reunir a los representantes mexicanos, Guadalupe Victoria y Eduardo Gorostiza con el contraalmirante Baudin.

El Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) te invita a conocer este y otros mapas históricos que resguarda la Mapoteca “Manuel Orozco y Berra” en su gran acervo. Puedes consultar la página web: http://mapoteca.siap.gob.mx/