El cerebro es el órgano encargado de coordinar las funciones de todo nuestro cuerpo. El 22 de julio se celebra el Día Mundial del Cerebro con la intención de hacer conciencia sobre la importancia de su cuidado, ya que las enfermedades cerebrales son la primera causa de discapacidad a nivel mundial, es por ello que hoy te presentamos una breve guía de cómo mantener tu cerebro activo y saludable.
Es importante recalcar que la salud del cerebro es parte integral de un proceso en el que el ejercicio, el sueño, la actividad intelectual y la actividad social son trascendentales, sin embargo, el eje principal de atención para mantener la salud del cerebro es la alimentación.
El consumo de pescados como el salmón, el bacalao o la sardina, aportan al cerebro gran cantidad de Omega-3, el cual favorece el desarrollo mental y la mejora del aprendizaje, al mismo tiempo que ayuda a mantener el correcto funcionamiento del cerebro.
La chía y la linaza son semillas que también aportan buena cantidad de ácido graso Omega-3, el cual reduce los triglicéridos, disminuye la coagulación de la sangre y reduce el riesgo de padecer accidentes cerebrovasculares.
Algunos otros alimentos que ayudan al correcto funcionamiento del cerebro son la avena que reduce la fatiga mental, el nerviosismo y el estrés, gracias a su aporte de Vitamina B1. Por otro lado, el huevo, al ser consumido, provee al cuerpo de proteínas que ayudan a prevenir la degeneración neuronal. Por su parte, las fresas son ricas en antioxidantes que actúan como estimulantes de la memoria.
Así como hay alimentos y productos que benefician al cerebro también hay algunos que lo perjudican, tales como el alcohol, que genera un deterioro considerable del sistema nervioso, o como los alimentos procesados elevados en grasas saturadas tales como los embutidos o las frituras.
También es recomendable evitar aquellos alimentos con alto contenido de hidratos de carbono (dulces, refrescos, pasteles), ya que al generar descontroles en la glucosa puede producir nerviosismo o ansiedad. Por estas razones debemos evitar en medida de lo posible consumir estos productos o incluirlos como parte de nuestra dieta diaria.
Recordemos que mantener nuestro cerebro saludable nos permitirá mantener nuestras actividades cognitivas en buen estado durante mucho tiempo, y por ende, mantener una mejor calidad de vida.