El plomo es tóxico para tu salud y lo puedes ingerir si: 

  • Chupas, mordisqueas o comes superficies pintadas o barnizadas (paredes o muebles), tierra, gises, plastilina, lápices, crayolas o juguetes. 

  • Comes cierto tipo de dulces con chile o tamarindo, que en sus ingredientes contienen plomo. 

  • Recurres a remedios caseros como el azarcón para curar el "empacho". 

  • Cocinas, calientas, sirves o guardas alimentos y bebidas en ollas, platos, jarras, jarritos de barro vidriados con plomo. 

En nuestro país la loza de barro vidriado es la vía de exposición más común.

 Es importante resaltar que en el caso del plomo es una sustancia tóxica que siempre te va a hacer daño, aunque sea en pocas cantidades.

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En cuanto al tiempo de contacto con el plomo, puede ser corto o prolongado, por una sola ocasión o en varias. Por ejemplo, si consumes frecuentemente alimentos o bebidas en recipientes de barro vidriado con plomo el tiempo de exposición es prolongado. 

En la elaboración de ollas, platos, jarras, jarritos de barro en horno de baja temperatura se usa un esmalte conocido como greta, que tiene plomo. Así, las piezas tienen un terminado brillante y las que se usan para cocinar o calentar alimentos y bebidas son más resistentes y aguantan el fuego directo y, además, son impermeables.

El plomo se desprende y se libera ante la presencia de calor y  cuando cocinamos o almacenamos alimentos ácidos como son el jugo de limón, vinagre, jitomate, tomatillo, salsas, mole, entre otros.

El consumo y almacenamiento de alimentos y bebidas en estos utensilios de barro de loza vidriada es parte de nuestras costumbres y tradiciones, fue a partir de la colonia que los artesanos empezaron  a elaborar estos productos con plomo. 

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Posiblemente has estado expuesto al plomo al usar loza de barro toda tu vida y crees que no te ha pasado nada, sin embargo, los efectos a la salud causados por el plomo suelen pasar desapercibidos, debido a que no se presentan de forma inmediata cuando nos exponemos, suelen ser silenciosos o presentar síntomas comunes con otros diagnósticos, como pueden ser el dolor de cabeza, cansancio, anemia, asma, dificultad para respirar, vómito o cólico abdominal.

El plomo reduce nuestra capacidad para aprender, para concentrarnos y dificulta la forma en que nos relacionamos con los demás.

Ahora que ya sabes cómo te puedes exponer al plomo, ¿Crees que ese dolor de cabeza o cólico abdominal podría deberse a qué preparas tu arroz en una olla de barro con loza vidriada?
 

 

Fuentes:

https://saludpublica.mx/index.php/spm/article/view/11550/11997

https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/lead-poisoning-and-health