Como breve antecedente, el sector cooperativo de ahorro y crédito en México, conocido como la Banca Social cuenta actualmente con 156 Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (SOCAP) autorizadas y supervisadas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), 502 con un nivel de operaciones básico y 4 en proceso de autorización, adicionalmente la Banca Social se integra por Sociedades Financieras Comunitarias (SOFINCO) supervisadas por Federaciones autorizadas.
Este importante sector atiende aproximadamente 7.8 millones de socios con presencia en todo el territorio nacional; con estos datos se puede aseverar que la Banca Social es el sector cooperativo más grande de nuestro país.
Las instituciones de la Banca Social son como cualquier otra institución financiera o banco, con capacidad para realizar préstamos, créditos, hipotecas y ofrecer otros productos financieros. Sin embargo, existen diferencias sustanciales que los hacen una mejor opción ante la banca comercial.
Para empezar, algo fundamental es que estas instituciones pueden realizar operaciones de ahorro y préstamo, pero lo hacen sin fines de lucro. Esto quiere decir que buscan el bienestar de la comunidad y de sus socios, no el enriquecimiento como fin último de la cooperativa, lo que plantea un cambio radical en la forma de trabajo, favoreciendo la solidaridad entre sus socios y con la comunidad.
Para la Banca Social no existen usuarios ni clientes, ya que se integran como socios, lo que les da una serie de beneficios que no poseen los bancos comerciales tales como: tasas de interés preferenciales, mejores condiciones de pago, seguro de protección (en el caso de las autorizadas) y menos comisiones. Aunado a ello, se ubican tanto en las ciudades como en lugares donde la banca comercial no tiene el interés de acceder como son: comunidades alejadas y zonas rurales o de difícil acceso.
Para acceder a las instituciones financieras de la Banca Social es muy sencillo, te lo explicamos en 4 pasos.
1.- Accede al mapa de la CONDUSEF (http://ow.ly/j1LB30rush3) y revisa las instituciones del listado, existen instituciones registradas ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, instituciones en proceso de autorización, instituciones de nivel básico e instituciones en otras circunstancias que vale la pena valorar.
2.- Encuentra las instituciones que operan en tu estado o región.
3.- Revisa, compara y elige el tipo de producto financiero que estés buscando, en el catálogo nacional de productos y servicios financieros (http://ow.ly/TV7430sa3Jr).
4.- Con ese listado puedes acercarte a cada una de estas instituciones, valorar, comparar y elegir alguna de acuerdo a lo que más se ajuste a tus necesidades. Cada una de ellas tendrá requisitos y productos financieros diferentes para ofrecerte.
Además de lo ya mencionado es importante puntualizar algunas dudas que normalmente quedan sobre la Banca Social.
• Las cooperativas reguladas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores son instituciones de confianza para el usuario. Están fiscalizadas y reguladas como cualquier banco.
• Muchas de ellas cuentan con infraestructura tecnológica de punta como cajeros automáticos y servicios digitales (apps, banca en línea, etc.).
• Son propiedad de todos sus ahorradores y no de un particular, por lo que su oferta de servicios integrales es con un enfoque social que promueven la actividad económica sustentable en beneficio de su región.
• Sin importar cuánto dinero tienen ahorrado, todos los socios tienen voz y voto en las decisiones de la institución.
• Apoyan a la previsión social de las comunidades en gastos médicos, educativos, funerarios, entre otros.
• La morosidad es penalizada por lo que asumir un compromiso financiero conlleva una responsabilidad para el socio.