Al evento asistieron archivistas de diversas instituciones públicas y, ante ellos, la titular del AGN refirió que su profesión enfrenta no sólo el reto de organizar documentos sonoros, audiovisuales, electrónicos, impresos en papel y en todo tipo de formatos, sino de contrarrestar el olvido y posicionarlos en la memoria del imaginario colectivo, en un momento en que nuestro país requiere conocerse más a sí mismo para enfrentar los desafíos que tiene por delante en todos los ámbitos de la vida nacional. Y agregó: “Se debe hacer un ejercicio para no olvidar, para estar anclados en el pasado que es, finalmente, lo que puede explicar nuestro presente”.
En ese sentido, indicó: “La memoria tiene diversas formas y perderla es lo peor que puede ocurrirle tanto a los individuos como a los pueblos. Sus consecuencias serían desastrosas, pues perder la memoria es perder la identidad; esto irremediablemente significaría extinguirse como pueblo”. Por lo mismo —señaló—, los archivistas tienen el inmenso y complejo desafío de “despertar la conciencia de las personas y de los pueblos, para ver y reconocer lo beneficios colaterales que trae consigo el ejercicio de la memoria”.
Al concluir la conferencia, los asistentes disfrutaron de una visita guiada por la exposición Constitución Mexicana 1917-2017. Imágenes y Voces, muestra dedicada a conmemorar el centenario de nuestra Carta Magna.
