Este programa apoya a los jóvenes de 16 años en adelante con un empleo temporal, y participan en tareas como la recuperación de espacios públicos, jardinería, reforestación de áreas verdes, construcción de guarniciones y pinta de banquetas. También en la apertura y mantenimiento de nuevos caminos para incentivar el crecimiento de sus localidades, mejorar su entorno y convivencia social.

Además, le brinda un apoyo económico a los habitantes de una comunidad rural o zona urbana que enfrenta una disminución en sus ingresos, y cuyo patrimonio se ha visto afectado debido a emergencias o desastres naturales.

En el PET se generan oportunidades equitativas, es por ello, que también participan madres de familia, personas con discapacidad, de la tercera edad y comunidades indígenas. Con esto, se promueve la inclusión social de los menos favorecidos.

El apoyo que brinda el programa, ayuda también para que los hijos de las personas que están inscritas en el PET se vean favorecidos, ya que los recursos económicos que perciben les permite adquirir artículos de primera necesidad, ropa, calzado, alimentos y útiles escolares.