Este enfrentamiento ocurrió en las cercanías de la ciudad de Puebla, en el ataque y defensa de los Fuertes de Loreto y Guadalupe, durante la Segunda Intervención Francesa en México.

Fue una importante victoria mexicana con resonancia global, pues venció a uno de los ejércitos más experimentados y respetados de la época y ponía a prueba un México que se encontraba dividido entre los liberales y los conservadores por la guerra de Reforma.

Esta victoria fue la única en esta guerra para el ejército mexicano. Aunque el ejército francés consiguió colocar a Maximiliano de Habsburgo en el trono del Segundo Imperio Mexicano en 1863, el resultado último fue que México venció a los invasores por medio de la guerra de guerrillas. En 1867 Maximiliano abdicó y fue ejecutado en el Cerro de las Campanas, en Querétaro.

El ejército mexicano estuvo bajo el mando del General Ignacio Zaragoza, a quien actualmente en México se ha honrado colocando su imagen en el billete de 500 pesos.

En México cada 5 de mayo se recuerda este triunfo único, y por influencia de los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos y otras partes del mundo, esta fecha es una fiesta mexicana adoptada como el “Día de la Cultura Mexicana”. Este acontecimiento se ha vuelto tan relevante que muchos extranjeros tienen incluso la idea errónea de que esta es la fecha de la celebración de nuestra independencia.