En el marco del Quinto Congreso Internacional de la Academia Mexicana de Ciencias, Artes, Tecnología y Humanidades (AMCATH), llevado a cabo en las instalaciones del Instituto de Investigaciones Eléctricas (IIE) en Cuernavaca, Morelos, se presentó la mesa redonda titulada: La tecnología en el futuro de México, en la que participaron Brenda Valderrama, titular de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología del Estado de Morelos; Carlos Morán Moguel, titular de la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial, y Emilio Zorrilla Vázquez Gómez, Consultor Industrial Internacional.

La mesa redonda dio inicio con la exposición de Carlos Morán, quien destacó los grandes logros de la ingeniería en el siglo XX, entre los que se encuentran la electrificación, la invención del automóvil, del avión, la radio, la televisión, la electrónica, el material de alto desempeño, etc. Asimismo hizo una prospección sobre la matrícula de ingeniería en los próximos diez años, destacando la calidad de la educación como un elemento importante para una buena enseñanza de la misma e hizo hincapié en los grandes cambios que ha sufrido la sociedad actual a nivel mundial, principalmente en el aspecto tecnológico y mencionó como ejemplo la internet y los dispositivos móviles, los cuales modifican las conductas y las expectativas.

Carlos Morán concluyó mencionando los desafíos de la ingeniería en el siglo XXI según la National Academy of Engineering entre los que destacan: hacer económica la energía solar, administrar el ciclo del nitrógeno, avanzar en la informática de la salud, prevenir el terror nuclear, avanzar en aprendizaje personalizado, proveer energía de la fusión, proveer acceso a agua limpia, diseñar mejores medicinas, hacer seguro el ciberespacio, diseñar las herramientas del descubrimiento científico, desarrollar métodos de secuestro de carbón, restaurar y mejorar la infraestructura urbana, mejorar la realidad virtual y considerar la ingeniería de reversa del cerebro, todo esto aunado a los retos globales que encara la humanidad, resaltando la importancia de los mapas de ruta tecnológica para la prospectiva tecnológica y para incidir en las políticas públicas sectoriales.

Por su parte, Emilio Zorrilla habló de la industria y la tecnología, destacando que el crecimiento de un país es función esencialmente de un mercado creciente con ingresos dignos y capacidad adquisitiva, así como una inversión reactiva y productiva a esa demanda, un ejército de trabajo creciente y productivo capacitado y recapacitado con salarios que rebasen cualesquiera inflación, un sector externo positivo competitivo, donde la exportación supere la importación y un desarrollo tecnológico dinámico.

Para que el país tenga un desarrollo económico aún más favorable, Emilio Zorrilla sugirió diez puntos: 1. elaborar una estrategia, programa y acción industrial para las ramas de la industria de transformación establecidas como prioritarias, 2. establecer un programa para incorporar talleres de identificación y desarrollo de proyectos en las instituciones de educación superior, 3. enfatizar la tarea del CONACYT en su vínculo con ramas prioritarias industriales rezagadas y de mayor oficio y perspectiva nacional, 4. transformar al fondo PYME en el Instituto de la Pequeña y Mediana Empresa para el financiamiento y apoyo técnico específico de ese subsector, 5. Negociar y profundizar los acuerdos y prácticas de la banca extranjera en México, 6. retomar el carácter de banco de fomento de Nacional Financiera, 7. reconvertir a Nacional Financiera, Bancomext y Proméxico en sus tareas originales, 8. emprender una tarea intersecretarial coordinada para la agroindustrialización, 9. provisión de apoyos a CANACINTRA para animar a los industriales, aumentando la productividad y la competitividad y 10. diseñar e implementar un programa que cumpla con la Ley Laboral para la sistemática y continua capacitación obrera. Zorrilla concluyó diciendo que dichas propuestas habrían de articularse en una planeación y programación industrial y una reconversión tecnológica orientada, que incluya a los diversos agentes económicos con la preparación técnico-tecnológica que ello implica, más allá de lo discursivo, de lo retórico, resaltando la tarea y responsabilidad de la ingeniería.

Brenda Valderrama habló sobre las circunstancias que impactaron al Estado de Morelos y que provocaron que se perdiera la capacidad innovadora de la Ciudad Industrial del Valle de Cuernavaca. Asimismo comentó que Morelos cuenta con una Ley Estatal de Innovación, Ciencia y Tecnología, así como una Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, un Sistema Estatal de Investigadores y un promedio de 40 centros de investigación, entre los que se cuenta el IIE, y concluyó diciendo que la tecnología y el desarrollo sustentable son dos de los temas clave para el propio desarrollo del Estado y su industrialización, tomando en cuenta la innovación y la sustentabilidad.

Posteriormente se procedió a la sesión de debate y preguntas y respuestas, para concluir con la entrega de reconocimientos a los ponentes.