Este estudio abona al debate público sobre el efecto del salario mínimo en la pobreza y provee una primera estimación específica para la pobreza multidimensional en México.
Encontramos que la elasticidad del salario mínimo sobre la pobreza es de -0.36; esto implica que entre 2019 y 2022 el número de personas en pobreza se redujo en 23.7% debido al salario mínimo. En otras palabras, de las 5.1 millones de personas que salieron de la pobreza entre 2018 y 2022, 4.1 millones se pueden atribuir exclusivamente a los incrementos del salario mínimo.
Resultados adicionales indican que los incrementos del salario mínimo no impactaron significativamente el nivel de empleo, pero sí tuvieron impacto en el ingreso laboral.
Respecto a los programas sociales, un incremento de 10% en el monto de la pensión para personas adultas mayores reduce la pobreza en 13%; y un 10% de incremento en el ingreso por becas a educación básica contribuye a una reducción de 3.5% en la pobreza por ingresos.