El valle de Tehuacán-Cuicatlán se encuentra dentro de la Reserva de la Biósfera Tehuacán-Cuicatlán en el centro sur de México, entre los estados de Oaxaca y Puebla y cuenta con una superficie de 145 mil 255 hectáreas.
En esta zona converge gran riqueza biológica, geológica, cultural e histórica. Por dicha riqueza, el 2 de Julio de 2018 fue declarado Bien Mixto de Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Considerado como la zona árida o semiárida con mayor biodiversidad de América, se trata de un área de diversificación y especiación de plantas, específicamente las cactáceas. Alberga aproximadamente 3,000 plantas vasculares, de las cuales 10% son endémicas y cuenta con el 70% de la flora conocida en el mundo. En el valle destacan los “bosques de cactus” en el que se pueden encontrar grandes biznagas que fueron utilizadas por el hombre hace más de mil años.
La fauna del Valle Tehuacán-Cuicatlán y de la Reserva de la Biosfera es menos conocida que su flora vascular, sin embargo, se tiene registros de 338 especies de aves, 83 reptiles, 28 anfibios y 14 peces y 102 mamíferos donde destacan el puma (Puma concolor), venado cola blanca (Odocoileus virginianus), el mapache (Procyon lotor), además, es un territorio de anidación del águila real (Aquila Chrysatetos) y la guacamaya verde (Ara militaris).
Es un sitio clave para el origen y desarrollo de la agricultura en Mesoamérica, ya que ha proporcionado información sobre la domesticación de especies como el maíz (Zea mays) y cuenta con vestigios arqueológicos que datan de hace 14,000 años de antigüedad.
De igual forma, el Valle es testigo del surgimiento de las lenguas proto-otomangues que dieron lugar a la familia lingüística más antigua y diversificada del continente americano.
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