El muestreo de suelo constituye el primer paso del análisis químico y físico. El cuidado que se tenga en la toma de la muestra del suelo, determinará en gran parte la validez de los resultados.

Actualmente, el análisis de suelos es una actividad importante cuando se desean obtener los más altos rendimientos en los cultivos.

Las especies vegetales requieren de 12 nutrientes que deben de obtener del suelo o de los fertilizantes. Por ello, un análisis adecuado de suelos ayuda a obtener la máxima rentabilidad.

¡Recuerda! La toma adecuada de las muestras en el campo son la base para que sea posible hacer un buen diagnóstico.

Conoce cómo preparar una muestra de suelo exitosa

¿Te has preguntado alguna vez qué sucede con las muestras de suelo que se envían al laboratorio? Desde la recolección hasta el análisis, cada paso es crucial para obtener resultados precisos y útiles. 

1. Recolección de sub muestras

El primer paso es utilizar una barrena de acero inoxidable para extraer muestras del suelo a la profundidad deseada. Es importante evitar contaminaciones entre estratos y zonas cercanas a los bordes de los predios para mantener la integridad de la muestra.

2. Preparación de muestra compuesta

Una vez que tengas tus submuestras, mezcla cuidadosamente todas las muestras del mismo estrato en una cubeta limpia. Forma un círculo con las muestras y elimina partes opuestas hasta obtener aproximadamente 1 kg de suelo representativo.

3. Identificación detallada

Etiqueta la muestra con información esencial como la fecha de recolección, número de muestra, nombre del predio, ubicación, información de contacto, tipo de cultivo, profundidad de muestreo y tipo de análisis solicitado. Una identificación clara y completa es clave para un procesamiento correcto.

4. Envío al laboratorio

Coloca la muestra preparada en una bolsa nueva y añade un papel de identificación entre ambas bolsas. Esto facilitará el proceso de análisis en el laboratorio preferido. Considera solicitar análisis estándar como materia orgánica, pH, nutrientes disponibles y cualquier recomendación específica para la siembra.

Además de seguir estos pasos, es importante considerar algunos factores clave al tomar una muestra de suelo:

1

Color del suelo

Puede indicar la presencia de nutrientes o problemas de drenaje.

2

Problemas de salinidad y/o sodicidad

Identificar áreas con estos problemas es crucial para las recomendaciones de manejo.

3

Textura del suelo

Determina la capacidad de retención de agua y nutrientes.

4

Pendiente del terreno

Influye en la erosión y distribución de nutrientes.

5

Condición del cultivo anterior

Puede revelar prácticas agrícolas anteriores y su impacto en el suelo.

6

Historial de cultivos anteriores

Conocer qué se cultivó previamente y su rendimiento proporciona contexto.

7

Adición de materia orgánica

Como la gallinaza, que puede mejorar la estructura y fertilidad del suelo.


 

Es crucial recordar que no se deben mezclar muestras de dos lotes diferentes, incluso si parecen similares. 

Los laboratorios del INIFAP están a tu disposición para ayudarte en este proceso y brindarte resultados confiables para una agricultura exitosa. 

Con una preparación adecuada de la muestra de suelo y una comprensión de los factores a considerar, estarás en el camino correcto hacia una gestión eficiente de tus cultivos. 

¡Recuerda, no subestimes el poder de una muestra de suelo bien preparada!