La nueva política está orientada a un desarrollo más incluyente, dando prioridad a los habitantes que viven en condiciones de pobreza y marginación; en el caso del campo, la estrategia se basa principalmente en el impulso a las actividades agropecuarias y acuícola-pesqueras a través de un conjunto de programas prioritarios que abordan problemas relacionados con la producción de granos básicos y estratégicos, leche y alimentos de origen acuícola a través de una política de precios y apoyos directos que incentiven la producción y den certidumbre a los productores.

Esta estrategia busca aumentar la productividad de los pequeños y medianos productores, ya que representan el 90 por ciento del total de productores del país y generan la mitad de la producción nacional.

Los programas prioritarios con los que la Secretaría de Agricultura brindará apoyo a los pequeños y medianos productores son:

  • Producción para el Bienestar

  • Precios de Garantía

  • Fertilizantes

  • Crédito Ganadero a la Palabra

Estos programas se complementarán con asistencia técnica, innovación tecnológica, gestión de riesgos y acceso a mercados, con el fin último de combatir la pobreza rural y mejorar la seguridad y soberanía alimentaria nacional.