Los nopales conforman el grupo vegetal con más especies y más amplia distribución de los cactus y se encuentran desde el norte hasta el centro del país y alcanzan su mayor complejidad y riqueza en el Altiplano central.
Su domesticación data de hace aproximadamente 8 mil años y se puede observar en una de las primeras representaciones de la fundación de Tenochtitlan es el Teocalli de la Guerra Sagrada, monolito hallado en las inmediaciones de lo que hoy es el Palacio Nacional.
Esta representación data de la época de Moctezuma Xocoyotzin, entre el año 1502 a 1520 y es un bajorrelieve donde aparece un águila dorada devorando una serpiente de cascabel parada sobre un nopal que emerge del cuerpo de una deidad y, a manera de tunas, ostenta corazones.
En nuestro país se cultivan alrededor de 862 mil 732 toneladas de nopales, Morelos es el principal productor con 404 mil 764 toneladas.
El nopal es una planta completa, pues nos provee de frutas y verduras de alto contenido nutricional, pero sobre todo, delicioso sabor; siendo la tuna y el xoconostle sus principales productos, perfectos para consumirse en el mes de septiembre.
Al consumir nopal estamos comiendo un alimento completo, con historia y un alto valor nutricional. Según el Instituto Mexicano del Seguro Social, es una planta auxiliar para el control de la diabetes e hiperglucemia, pues está comprobado científicamente que logra estabilizar y regular el nivel de azúcar en la sangre.
El nopal es símbolo de nuestra identidad como pueblo mexicano, este mes patrio consúmelo en todas sus opciones.