Doctor Bernardo González Aréchiga, rector institucional de la Universidad del Valle de México.
Maestra Graciela Romero Cambrón, rectora de la Universidad del Valle de México, Campus lomas verdes.
Licenciado Javier Careaga, vicerrector académico de servicios estudiantiles.
Maestro José Ahdemir Ariza Tovar, director de hospitalidad, turismo y gastronomía.
Respetable personal directivo, profesores y alumnos del plantel.
Señoras y señores.
Compañeros de armas.
Representantes de los medios de comunicación.
Muy buenas tardes.

Es un gran honor encontrarme en esta prestigiosa Universidad del Valle de México que en más de 57 años de experiencia educativa, ha contribuido a que quienes tienen el privilegio de estudiar en esta institución busquen el éxito a lo largo de su vida profesional. 
Particularmente guardo aprecio especial por esta universidad; personas muy cercanas a mí, han estudiado en sus aulas, llevándose al egresar gratos recuerdos y significativas vivencias.

En la Secretaría de la Defensa Nacional, coincidimos con su ideología, en el sentido de que la educación es un principio transformador y sobre el derecho que tienen los seres humanos para crecer y desarrollarse. 

Esa convergencia de pensamiento ha motivado a que ambas instituciones trabajemos de manera conjunta, en actividades concretas como las siguientes:
En noviembre de 2011, signamos un convenio general de colaboración con carácter indefinido para realizar de manera conjunta programas académicos, de investigación, de extensión y de prestación de servicios.

Gracias a la colaboración entre el voluntariado de la secretaría de la defensa nacional y este campus, en mayo del año pasado egresaron de las licenciaturas en derecho, psicología y administración, 50 damas derechohabientes, esposas de militares y 2 compañeras militares.

Del año 2013 a la fecha, en este plantel, han realizado estudios de nivel licenciatura y maestría, 9 militares, y actualmente se encuentran estudiando 7 más.

Quiero destacar también, que del 2013 al 2017, esta universidad ha sido la casa de estudios de 5 mil 680 alumnos, hijos de personal militar, y en el ciclo lectivo 2017-2018, se encuentran estudiando mil 317 jóvenes.

Señoras y señores, jóvenes estudiantes:

El pasado mes de septiembre los mexicanos sufrimos los embates de la naturaleza, los terremotos del 7 y 19 causaron severos daños en diversas entidades del país.

Ante estas emergencias, los mexicanos dimos cuenta al mundo de que somos uno solo; pusimos a prueba nuestra identidad, fortaleza y espíritu solidario; sociedad, gobiernos, instituciones y fuerzas armadas, fuimos uno solo… el sentimiento era uno mismo: mitigar el dolor y el sufrimiento de las familias que resultaron afectadas.

En estos lamentables infortunios, fue destacable la valentía, entrega y determinación de muchos mexicanos en su mayoría jóvenes como ustedes que de manera voluntaria salieron a las calles para colaborar.

Aquí hago un paréntesis para externar nuestro reconocimiento a esta prestigiosa universidad, ya que personal de todos sus campus, instalaron centros de acopio, salieron a distribuir despensas, y a proporcionar apoyo médico y psicológico; gesto que habla de su sensibilidad y humanismo; pero sobre todo, habla del espíritu solidario que se infunde en la comunidad estudiantil.

Por nuestra parte y bajo el mando de nuestro comandante supremo, el presidente de la república, marinos y soldados, desde los primeros momentos de estos siniestros, actuamos de manera rápida y coordinada, gracias a la destreza del personal militar y a la experiencia que hemos adquirido a lo largo de 50 años de aplicación del Plan DN-III-E, en diversas entidades del país y bajo el esquema de ayuda humanitaria en el extranjero.

Coadyuvamos en la organización de equipos y dosificación de personal, labores de rescate, atención médica, establecimiento de puentes aéreos y de albergues, operación de centros de acopio y distribución de alimentos; desplegamos:

Más de 18 mil 250 hombres y mujeres.
25 binomios canófilos.
Un hospital quirúrgico móvil y 2 ambulancias de terapia intensiva.
8 centros de atención psicológica.
31 células de intendencia, responsables de la elaboración de alimentos.
2 plantas potabilizadoras de agua.
4 cocinas comunitarias y 3 máquinas tortilladoras.
168 baños portátiles.
9 centros de acopio y 43 albergues donde fueron asistidas más de 8 mil personas; de los cuales continúan 31 en operación.
659 vehículos y 37 aeronaves.
26 unidades de maquinaria pesada, 27 torres de iluminación y 18 visores de pared.

Destaco que se rescataron más de 15 niños y adultos con vida y se recuperaron 86 cuerpos. 

Asimismo, se trasladaron por vía terrestre y aérea, más de mil 475 toneladas de despensas; se distribuyeron más de 725 mil 350 raciones y se removieron grandes cantidades de escombros.

Nos sentimos satisfechos de auxiliar a nuestros compatriotas, de trabajar hombro a hombro con otros mexicanos, de hacer equipo con México y por el pueblo de México; porque cómo lo he mencionado en otras ocasiones, los soldados somos el pueblo mismo en uniforme militar. 

Somos mexicanos mujeres y hombres que servimos a la nación de día y de noche, los 365 días del año en todo el territorio nacional, soldados la mayoría jóvenes como ustedes que también tienen sueños y deseos de superación, de ser mexicanos de bien, que contribuyen al desarrollo y progreso de nuestro país, dispuestos y convencidos de poner en riesgo sus vidas en beneficio de las familias mexicanas, sin distingos; imbuidos de una enorme disposición de servir a la sociedad y a sus gobiernos.

Doctor Bernardo González Aréchiga:

Las mujeres y hombres que integramos el ejército y la fuerza aérea, agradecemos el inédito reconocimiento que esta comunidad universitaria hace a nuestra institución, por las labores realizadas durante la aplicación del Plan DN-III-E, en los pasados sismos de septiembre.

Reconocimiento que hare extensivo a los más de 213 mil soldados que con honor, entrega y lealtad institucional cumplen las misiones asignadas en aras del bienestar de los mexicanos.

Estas deferencias hacia sus fuerzas armadas, nos motivan para seguir preparándonos y mantenernos a la altura de las demandas actuales; solo así tendremos capacidad de respuesta ante cualquier emergencia que atente contra la seguridad y estabilidad de los mexicanos.

Respetables directivos, docentes y alumnos:
Hoy, los gobiernos del mundo entienden que todo lo que viene hacia adelante está en función de la calidad de la juventud; la esperanza de las naciones, está fincada en la inspiración y el deseo de los jóvenes de lograr un futuro mejor… y nosotros, somos un país de jóvenes.

La Universidad del Valle de México y el instituto armado convergemos en una premisa común:

Para ustedes, sus estudiantes son el eje principal y mientras más completa sea su experiencia en la universidad, más sólidas serán sus competencias personales y profesionales, a partir de las cuales participarán en la mejora de su comunidad y la sociedad de México y del mundo.

Para el ejército y fuerza aérea, nuestras mujeres y hombres que visten con orgullo el uniforme de la patria, son el principal activo; su constante preparación, excelente educación y adecuado entrenamiento han permitido que en el actuar cotidiano, se desempeñen con eficiencia y profesionalismo.

Así lo hemos hecho y así lo seguiremos haciendo; porque para todos los que tenemos el privilegio y orgullo de formar parte de las fuerzas armadas, no hay mayor satisfacción que servir a méxico en su conjunto.

Muchas gracias.