Boletín No.050

• La vivienda es para prosperar y devolver felicidad y tranquilidad a sus moradores, aseguró la titular de la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Rosario Robles Berlanga.
• De visita a Mérida, Yucatán, anunció que con los programas de Rescate de Espacios Públicos, Hábitat y PREP, el Gobierno de la República aporta más de 50 millones de pesos.
• A nombre de los beneficiarios, Zeidy Chan, aseguró que gracias a los programas sociales del Gobierno de la República, familias como la suya, donde su esposo es de oficio albañil, tienen hoy acceso a una vivienda segura.

Mérida, Yuc.- La Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Rosario Robles Berlanga, encabezó hoy una jornada de entrega de vivienda urbana y rural para los sectores más vulnerables de la entidad y entregó los recursos correspondientes a los programas de Hábitat y Rescate de Espacios Públicos.

La secretaria Robles Berlanga dijo que para 2016 habrá más vivienda en esta entidad, para tranquilidad y felicidad de los yucatecos y yucatecas, “porque sabemos que la vivienda es un patrimonio tangible para prosperar”.

En este marco, Rosario Robles firmó un adéndum al Convenio de Vivienda en la entidad para que en el 2016 se entreguen casa habitación a mil jóvenes, subsidios y escrituras para empleados estatales y municipales, –como policías, bomberos y burocracia–, así como, población abierta, jefas de familia, taxistas y personas con alguna discapacidad.

Los esfuerzos institucionales coordinados, dijo, están enfocados a disminuir la pobreza patrimonial, combatir el hacinamiento, prevenir la violencia y dotar de vivienda a los sectores menos favorecidos de la población, que no cotizan en ningún organismo de vivienda.

En el Gran Museo de la Cultura Maya, acompañada del gobernador de la entidad, Rolando Zapata Bello, la secretaria Robles Berlanga, informó que durante esta gira de trabajo se entregó vivienda para 796 familias, a fin de regresar su tranquilidad y seguridad.

Zeidy Chan, a nombre de los beneficiarios, manifestó que gracias a los programas sociales del Gobierno de la República, familias como la suya, donde su esposo es de oficio albañil, tienen hoy acceso a una vivienda segura.

Su hijo Jesús de Guadalupe, de ocho años, quiso agradecer a la maestra Robles Berlanga, ruborizado, le dijo que su discurso quiso aprenderlo de memoria, “pero ya lo olvidé, lo que quiero decirle es que me gusta mi nueva casa porque ahora sí tendré fiesta de cumpleaños en diciembre y, ¡mi cuarto propio donde voy a dormir tranquilo, colocar mis juguetes y un ventilador. Me siento tranquilo y contento!”, concluyó el pequeño.

En este proceso, se beneficiaron con casa-habitación 74 familias de policías, 69 hogares dirigidos por jefas de familia, 83 de jóvenes y el resto para personas que no cotizan a ningún organismo de vivienda.

Para confianza de la población, expuso la funcionaria, el Gobierno de la República trabaja en el México Próspero y en Paz que todos queremos. Aquí, firmó junto con el gobierno de Yucatán y el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), el segundo adéndum del Convenio de Coordinación en materia de Vivienda, que garantiza para el siguiente año una inversión federal y estatal por más de 329 millones de pesos, para construir casas en beneficio de 8 mil 500 personas.

La secretaria Rosario Robles reiteró que la vivienda es para prosperar y para construir ciudades incluyentes, sustentables y resilientes, “queremos que se sientan contentos y tranquilos, queremos que los policías se sientan seguros y que empiecen por su casa propia, que las madres solteras y los jóvenes tengan acceso a los derechos de nueva generación que incluye vivienda, salud, educación y alimentación”.

Las acciones de vivienda que vienen comprometidas en el paquete del 2016, irán acompañadas de una recuperación de los espacios públicos y las obras de infraestructura social, que permitirán mejorar la calidad de vida de las personas con entornos favorables a la convivencia social, evitando el hacinamiento y la violencia familiar, apuntó.

La titular de SEDATU explicó, que el adéndum signado, es la herramienta jurídica que permite concertar los esfuerzos de los tres órdenes de gobierno federal, estatal y municipal, con el propósito de promover el desarrollo ordenado y sustentable, la regularización de la vivienda urbana, para mejorar la vivienda rural, reducir el rezago y procurar un lugar digno para los yucatecos y las yucatecas.

La directora de CONAVI, Paloma Silva de Anzorena dijo, “estamos construyendo hogares no sólo casas y de ahí la importancia de que la atención sea focalizada a familias que ganan menos de 5 mil pesos al mes, y donde se ubican jefas de familia, jóvenes, personas con alguna discapacidad”.

Posteriormente en el Parque del Paseo Verde, la secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, entregó títulos de propiedad, un estudio de reubicación de familias de alto riesgo del municipio de Celestún, las llaves de las casas en beneficio de 200 familias y que corresponden al programa de “Vivienda Digna”, a cargo del Fideicomiso del Fondo Nacional de Habitaciones Populares (FONHAPO) y de la Comisión para la Defensa de los Pueblos Indígenas.

Para el Programa de Espacios Públicos, la SEDATU entregó 10 millones de pesos, destinados a la construcción de un área de juegos acuáticos, sobre un terreno rescatado de 7 kilómetros y que en el pasado representó un foco de inseguridad que hoy “se ha convertido es un espacio de recreación y convivencia social segura”, apuntó la maestra Robles Berlanga.

Robles Berlanga en este paquete de ayuda también participó de la entrega simbólica de escrituras el director de la CORETT, Jesús Alcántara Núñez, informó que se entregaron hoy 149 escrituras a igual número de familias que, al finalizar este año, sumarán más de mil 200 familias con esa seguridad patrimonial.

Acompañada del subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, Juan Carlos Lastiri, la maestra Robles Berlanga felicitó a quienes obtuvieron su vivienda y destacó que en el concepto de la “justicia cotidiana” las mujeres jefas de familia, terminan con su papelito en la mano, porque en la SEDATU se reconoce que “una escritura en manos de una mujer garantiza que el patrimonio no se va a perder y porque el gobierno de Peña Nieto sabe que las madres aspiran a tres cosas para sus hijos, que coman, tengan educación y una vivienda digna”.