Aunque se ha convertido en un gran aliado en estos momentos de confinamiento, la capacidad de las redes no es infinita por lo que la velocidad y calidad pueden verse perjudicadas. Si usas con responsabilidad el Internet no te verás afectado ni afectarás a otras personas.
- Un plan de consumo es lo mejor que puedes hacer: Planifiquen en familia y pongan reglas con las cuales prioricen necesidades (laborales o educativas), así podrán mantener la continuidad del servicio.
- Establezcan horarios para el entretenimiento: Antes de las 8 de la mañana y después de las 7 de la noche es cuando hay menos tráfico de datos, ténganlo en cuenta para cuando quieran ver una película.
- Regresen al uso de teléfono fijo: Si cuentan en casa con este servicio úsenlo en lugar de llamadas por aplicaciones.
- Infórmense sobre su consumo de datos móviles: Algunos proveedores ofrecen datos ilimitados, pero se guían por una política de uso justo en la que se limita o restringe la velocidad.
- Moderen el uso de videoconferencias: En reuniones laborales prefieran el servicio de voz y limiten el envío de archivos pesados y correos masivos.
- Sacrifiquen calidad por los demás: Vean videos en baja calidad, así no ocuparán mucho ancho de banda y las personas a su alrededor, como ustedes, también podrán utilizar Internet sin problemas.
Internet es más que la facilidad y velocidad con la que accedes a información, música o videos. Administra y raciona su uso, sobre todo en esta época y más si lo haces desde tu teléfono celular.
¡Piensa en los demás, usa Internet con responsabilidad para evitar su saturación!