Al crecer, las niñas y niños presentan cambios y con estos van adquiriendo habilidades funcionales graduales desde su nacimiento y hasta los 5 años, estas secuencias se describen como hitos tradicionales del desarrollo.
Al analizar los hitos en los infantes podemos reconocer a aquellos que pueden estar en riesgo de retraso. Por ello, para vigilar el adecuado crecimiento de tu bebé desde su nacimiento y hasta los 2 meses, el ISSSTE te recomienda prestar atención a los siguientes hitos:
- Te mira a los ojos.
- Sigue objetos y personas con la vista.
- Observa su mano y se la lleva a la boca.
- Sostiene la cabeza aunque sea por unos segundos.
- Succiona con regularidad y firmeza el seno materno.
- Gira la cabeza al ser llamado o con ruidos.
- Deja de llorar si se mantiene calientito, seco y alimentado.
- Expresa de diferentes formas malestar, hambre, dolor, etc.
- Reconoce las voces de mamá y papá.
Es necesario acudir inmediatamente al médico si:
- No te sigue con la mirada.
- No sostiene la cabeza.
- No succiona.
- No responde a los ruidos.
- No sonríe.
- Mantiene los puños cerrados.
- No se mueve.
Para ayudar a tu bebé con su desarrollo, el instituto te recomienda estimularle de la siguiente manera:
- Tómale de las manos, ayúdale extendiendo sus brazos y flexionándolos sobre su pecho, puedes hacer lo mismo con sus piernas sobre su abdomen.
- Colócalo boca abajo por momentos breves, muéstrale un juguete para lograr que levante la cabeza y lo siga con la mirada. Si observas irritabilidad, llanto inconsolable o que se ponga muy duro es un dato de alarma. Recuerda no hacerlo dormir en esta posición ya que está relacionada con muerte súbita infantil y reflujo gastroesofágico.
- Dale un juguete con colores llamativos como las sonajas, que tenga un mango que quepa en su manita para que logre sostenerlo paulatinamente. También puedes colgar un móvil sobre su cuna, asegurándote que esté bien colocado.
- Háblale en todo momento pronunciando correctamente las palabras. Evita los diminutivos o malas palabras.
- Cántale canciones, realiza gestos, sonidos con tu boca y movimientos (besos, silbidos etc.). Ponle música clásica a un volumen moderado.
- Acaríciale con telas de diferente textura (algodón, terciopelo, seda, etc.), dale objetos seguros que estimulen su tacto.
- Sonríe para que te imite.
Es importante que socialice con otros miembros de la familia, de preferencia que sean las mismas personas para que forme un vínculo con ellas.
Se recomiendan baños de sol, 10 a 15 minutos máximo a través de una ventana.
Recuerda que la estimulación durante sus primeros años de vida son determinantes para su buen desarrollo.
Continuemos con los hitos de los 3 y hasta los 5 meses, para vigilar el adecuado desarrollo de tu pequeño o pequeña en esta etapa debes prestar atención a las siguientes acciones y comportamientos:
- Hace esfuerzos por alcanzar un objeto con las dos manos.
- Se lleva las manos u otros objetos a la boca.
- Utiliza toda su mano para tomar los objetos.
- Toma objetos con las dos manos.
- Inspecciona sus manos.
- Produce sonidos o los imita.
- Reconoce voces familiares.
- Sostiene su cabeza y la gira de un lado a otro.
- Sostiene su pecho y cabeza en la posición boca abajo.
- Extiende sus brazos para que lo cargues.
- Mueve constantemente piernas y brazos.
- Cuando tiene 5 meses, alcanza su boca con los pies.
- Logra sentarse con ayuda.
- Se gira en su propio eje.
- Se impulsa con los las piernas cuando lo pones en posición de pie.
Por el contrario, es señal de alarma y debes acudir al médico si durante esta etapa observas que:
- No se interesa por tocar o mirar los objetos que le pones al frente.
- No lleva sus manos u objetos a la boca.
- No produce sonidos.
- No reacciona ante personas familiares u objetos llamativos.
- No sostiene la cabeza.
- No se sienta ni con ayuda.
- No se rueda.
- No voltea hacia sonidos cercanos.
- Observas movimientos únicamente con un brazo o una pierna, lo adecuado es que mueva por igual los dos brazos y las dos piernas.
Durante estos meses puedes estimular su desarrollo al hacer lo siguiente:
- Tomar sus manos y muñecas suavemente para realizar movimientos circulares de sus brazos, después realizar movimientos de los brazos hacia arriba y abajo, puedes hacer lo mismo con sus piernas.
- Hacer distintos sonidos a su alrededor para favorecer que busque el sitio de donde provienen.
- Colocándole boca abajo para que se acostumbre a esta posición y realizarle masajes de arriba hacia abajo sobre su espalda desnuda con superficies de diferentes texturas.
- Muévete con él en la casa usando un rebozo o fular siempre mirando hacia adelante, es muy importante que nunca cocines mientras le cargas.
- Permite que tome objetos más grandes al tamaño de sus manos para evitar accidentes y favorece que los tome con ambas manos.
- Con tu bebé boca arriba, ayúdale tomando sus brazos a pasar a la posición de sentado y regrésalo a acostarse de nuevo, repítelo de 5 a 10 veces, dependiendo de qué tan cómodo se observa con el ejercicio.
- Ayúdale a aplaudir tomando sus manos.
- Coloca objetos con colores llamativos y sonidos para que los tome.
- Colócate frente a él para que vea cómo se mueve tu boca mientras hablas e imite los movimientos.
- Celebra sus logros haciéndole sentir importante.
- Colócalo frente a un espejo para que reconozca su propia imagen.
- Acércate entre 30 y 50 cm, muévete en un rango cercano para que siga tu cara.
- Llévale a recorrer la casa en tus brazos y descríbele cada habitación para que las conozca.
Además, para favorecer su socialización, te compartimos los siguientes ejercicios:
- Juega a las escondidas detrás de algo que te cubra y sonríele al salir.
- Permite que otras personas familiares o de confianza lo carguen para que los conozca.
- Sonríe frecuentemente cuando juegues con él o ella.
- Dile a todos que le llamen por su nombre para que responda volteando hacia quien le llama.
- Platícale o cántale mientras le bañas.
- Siéntale en una silla portabebés al centro de la mesa cuando la familia está comiendo, así se dará cuenta que la comida es algo social y que se disfruta en familia.
