El cáncer de la boca es una enfermedad devastadora, no solo por lo que ella misma implica para quien la padece, sino también por las secuelas y alteraciones de calidad de vida que los tratamientos implican, por ello, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) orientamos sobre la detección oportuna de los síntomas.

Este cáncer se origina en las mucosas (recubrimiento interior de la boca) de diversas estructuras anatómicas como labios, lengua, piso de la boca, encías y paladar.

El tipo más frecuente es el carcinoma epidermoide y según la Organización Mundial de la Salud (OMS), junto con el cáncer de la orofaringe ocupa el quinto lugar de todas las neoplasias del cuerpo.

Existen zonas geográficas en el mundo en donde este cáncer es endémico, como en el subcontinente Hindú y en Asia, principalmente asociado a hábitos de masticar sustancias irritantes como la areca y la nuez de betel; ésto en México no se acostumbra y el cáncer oral está relacionado con malos hábitos de higiene, la presencia de placa dento-bacteriana pero, sobre todo, al consumo de tabaco, alcohol y cannabis, la infección por el Virus del Papiloma Humano, principalmente los tipos 16 y 18.

La posibilidad de curación y que el tratamiento implique la menor secuela posible depende de la etapa en la cual se diagnostique, en fases iniciales el éxito terapéutico es mayor y las secuelas menores, no así en etapas avanzadas; desafortunadamente y debido a diversos factores, en nuestro país más de la mitad de personas con esta enfermedad son diagnosticadas en etapas loco-regionalmente avanzadas, lo que implica la necesidad de tratamientos complejos, mutilantes y que dejan secuelas que impactan la calidad de vida del paciente, disminuyendo su capacidad para hablar y alimentarse.

Las manifestaciones del cáncer de boca se presentan cuando la enfermedad inicia, lo cual haría pensar que la persona debería acudir a consulta inmediatamente, sin embargo desafortunadamente no es así; los principales síntomas son: úlcera persistente (afta), dolor bucal, sangrado de la boca, movilidad inexplicada de piezas dentarias, bulto en el interior de la boca y en el cuello.

Cualquiera de estas manifestaciones son datos de alerta, sobre todo si la persona tiene factores de riesgo y son indicaciones para consultar inmediatamente; las normas internacionales sugieren que cualquier lesión al interior de la boca que con tratamiento local no desaparece en una semana, es una indicación absoluta de consultar al especialista.

Los médicos de primer contacto (principalmente estomatólogos y médicos familiares) ante estas manifestaciones deben iniciar procedimiento a través de una biopsia de la lesión para descartar un cáncer oral.

La prevención suspendiendo hábitos de riesgo y manteniendo higiene bucal adecuada son fundamentales.

Departamento de Tumores de Cabeza y Cuello

Hospital de Oncología del CMN Siglo XXI del IMSS