El 4 de agosto se celebra el Día Latinoamericano de las Frutas, una fecha es impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por la Organización de las Naciones Unidad para la Alimentación y la Agricultura (FAO) con el objetivo de incentivar el consumo de frutas y verduras en la población debido a que estudios realizados en el continente demuestran el bajo consumo de estos alimentos con respecto a otros lugares del mundo.
En botánica, el fruto es el órgano procedente de la flor, o de partes de ella, que contiene a las semillas hasta que estas maduran. El fruto es otra de las adaptaciones, conjuntamente con las flores, que ha contribuido al éxito evolutivo de las angiospermas. Así como las flores atraen insectos para que transporten polen, también muchos frutos tratan de atraer animales para que dispersen sus semillas. Si un animal come un fruto, muchas de las semillas que éste contiene recorren el tracto digestivo del animal sin sufrir daño, para después caer en un lugar idóneo para su germinación.
Las frutas y verduras son importantes componentes de una dieta saludable y su consumo ayuda a prevenir diversas enfermedades, como las cardiopatías, el cáncer, la diabetes y la obesidad. La Asociación Americana del Corazón y otros organismos Internacionales recomiendan que nuestra dieta incluya 5 o más porciones de frutas y verduras al día. Son ricas en minerales, tienen gran cantidad de fibra y alto contenido de agua. Las vitaminas, los minerales y otros componentes de las frutas y las verduras son esenciales para la salud humana. Además, el aumento del consumo de frutas y verduras puede ayudar a desplazar los alimentos ricos en grasas saturadas, azúcares o sal.
La ingesta insuficiente de frutas y verduras es uno de los 10 factores principales de riesgo de mortalidad a escala mundial.
A partir de la 57ª Asamblea Mundial de la Salud aprobó la Estrategia mundial sobre régimen alimentario, actividad física y salud, el OMS propone fomentar activamente el consumo de 5 frutas al día en todo el mundo, y en especial en los países en desarrollo.