Entre las principales obligaciones que impone la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos a la Procuraduría General de la República, se encuentran las de investigar y perseguir los delitos federales; así como la de actuar como defensor de los intereses de la sociedad y de la Federación, y para cuidar y promover los derechos humanos de la ciudadanía en el ámbito de la procuración de justicia. En este sentido, y para reiterar nuestro compromiso indiscutible con la meta de lograr un México en Paz, en la PGR nos propusimos incorporar un análisis profundo de los modos de operación de los grupos criminales, así como de las nuevas formas de delincuencia y violencia. Esto nos ha permitido enfrentar
de manera eficaz los desafíos del actual contexto delincuencial y responder de forma adecuada a las demandas de la sociedad en materia de procuración de justicia.
Cumplo el deber de presentar el Cuarto Informe de Labores de la Procuraduría General de la República 2015-2016 al Honorable Congreso de la Unión, con la certeza de que este documento abonará al diálogo público, en la permanente búsqueda de mejores acciones para contribuir a la tranquilidad de las y los mexicanos. Este informe es al mismo tiempo un ejercicio de transparencia y rendición de cuentas a los ciudadanos, toda vez que recopila las acciones de la institución y sus resultados, durante el período que comprende del 1 de septiembre de 2015 al 30 de junio de 2016. Estas acciones se enmarcan en los cuatro ejes rectores que establecí desde el inicio de mi gestión al frente de la PGR: Procuración de Justicia Eficaz, Respeto y Defensa de los Derechos Humanos, la Implementación del Sistema de Justicia Penal Acusatorio, y Transparencia y Rendición de Cuentas.
Debo destacar que la implementación del Sistema de Justicia Penal Acusatorio es un logro que nos enorgullece. La administración del Presidente Enrique Peña Nieto, se impuso la tarea de reestructurar el andamiaje legislativo e institucional para incrementar la calidad de las instituciones de seguridad y de procuración e impartición de justicia de nuestro país. En este tenor, como resultado de un esfuerzo transversal, se lograron concretar cambios sin precedentes y se logró transitar a un sistema de justicia penal acusatorio, cuya operación contribuirá de manera sustancial a un Estado de Derecho más sólido y a una procuración de justicia eficaz y eficiente, accesible para todos, transparente y respetuosa de los derechos humanos. La PGR, en tanto la máxima instancia de procuración de justicia del país, tiene el compromiso irrenunciable de seguir trabajando en la consolidación de este modelo de justicia penal, para lo cual no escatimaremos recursos para garantizar procesos justos e investigaciones basadas en métodos científicos.
Son relevantes los logros que se desglosan en las siguientes páginas. No obstante, estamos plenamente conscientes de los retos que aún debemos enfrentar y por ello, constantemente estamos emprendiendo acciones de mejora institucional. La sociedad mexicana exige, con justa razón, una procuración de justicia que se base en investigaciones rigurosas, servidores públicos honestos y capacitados en el Sistema de Justicia Penal Acusatorio y respeto a sus derechos fundamentales. La PGR trabaja día a día por cumplir cabalmente con estas exigencias y con nuestro mandato constitucional.
La construcción del país que anhelamos requiere de la labor de todos. Estoy convencida que en la medida en que ejercicios como éste se continúen realizando, no sólo la democracia sino también el Estado de Derecho resultarán beneficiados. Es indudable que sometiendo al escrutinio público el resultado de nuestras acciones, nos da oportunidad a los servidores públicos de revisar, fortalecer y perfeccionar nuestras acciones para servir mejor a las y los mexicanos.
Mtra. Arely Gómez González
Procuradora General de la República
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