Reúnen el pensamiento político de Ricardo Flores Magón

“Patria, gobierno, ley, religión, bandera… hojas secas del viejo árbol de la tiranía. Cosas muertas, cosas muertas, ¡a enterrarlas!” Así escribía Ricardo Flores Magón en 1916 desde el semanario anarquista Regeneración en el tiempo mexicano sacudido por la Revolución. Para que sus palabras –que aún hoy suenan a fragor–, pudieran alcanzar entonces a sus lectores, el semanario viajaba escondido en sacos de harina, y luego era depositado, ejemplar, por ejemplar, en los buzones del correo de Oakland, California, por las pequeñas hijas del socialista Karl Hoffman.

Por ello es un privilegio que el lector tenga ahora en sus manos el volumen de Obras Completas, editado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, que compila los 120 artículos publicados por Flores Magón en ese año.

Una baraja distribuida por manos cuya avaricia no descansa, ha lanzado a la humanidad en dos grandes bandos: los que todo tienen y los que nada poseen. Verdugos y esclavos. Las letras crean mundos imaginarios en los cuales extraviarse, pero también nombran sueños y al nombrarlos dan vida a otros mundos posibles en la realidad. Los escritos de Ricardo Flores Magón, existen no sólo como memoria, sino para recordarnos que aún esos mundos penden como posibilidad real. Fue él quien vitalizó la lucha revolucionaria mexicana, la que la tradujo para iguales y extranjeros y la defendió dentro y fuera del país.

Los artículos son un vasto andar por la historia de la Revolución Mexicana, sin dejar de  mirar detalladamente el panorama mundial. Las huelgas y luchas de los ferrocarrileros y mineros estadounidenses, los compañeros presos, las huelgas obreras en México, los revolucionarios cubanos, la Rusia convulsa, los manifiestos de Emiliano Zapata, los engaños de Venustiano Carranza, y en todos lados, destacándose la unión obrera consciente ya de que su lucha es contra una clase parasitaria, la clase burguesa. A lo largo del volumen se repite la idea central, sin la desaparición de las condiciones económicas y sociales que imperaban, no sería posible otro mundo, un mundo humano.

Para ello también es necesario que esa conciencia sea posible en las fuerzas que luchaban contra el pueblo, por esa razón, Ricardo Flores Magón dedica uno de sus artículos A los soldados carrancistas: “Esos rebeldes son tus hermanos, son pobres como tú. Ellos, como tú, desafiaron en la fábrica la anemia y la tisis, produciendo telas que no habían de cubrir sus desnudeces, zapatos que no habían de calzar sus pies. Son tus hermanos, sólo que más inteligentes que tú, porque saben que nunca ningún gobierno se ha preocupado por el bienestar de la clase pobre...”

Eran tiempos en que “ideal” era la fresca palabra, era aspiración y meta que daba sentido a la lucha, al padecimiento, a la solidaridad. Cuando perseguir los más altos valores no avergonzaba, al contrario, validaba incluso la muerte.

Repetidamente se denuncian las condiciones infrahumanas en que subsisten los trabajadores del mundo, maquinaria verdadera del mismo, que no sólo los arrastra a ellos, sino a familias completas. Repetido también es el grito de ayuda a los compañeros injustamente perseguidos y apresados, que sin recursos económicos no pueden sostener sus casos ante las leyes estadounidenses o mexicanas.

Continuas las acusaciones contra el régimen de Venustiano Carranza, fundado en la traición a la lucha revolucionaria. Leer a Flores Magón es leer la historia de la Revolución Mexicana a través del pensamiento que la sustentó.

Es la historia de la libertad de pensamiento, sin la cual los oprimidos no podrán romper nunca las cadenas. Es la historia de la fuerza ante la cual la amenaza se estrella y se hace añicos, porque no puede vencer a la voluntad.

La crónica del anarquismo activo se conoce a través de estas páginas, pero al mismo tiempo es la biografía  de la necesidad y de la solución radical para, si no abolirla, sí por fuerza, mitigarla.

Ricardo Flores Magón (Eloxochitlán, Oaxaca, México, 1873 –Kansas, EU, 1922). Político y periodista mexicano, al que se considera iniciador de la Revolución Mexicana. Ha permanecido como uno de los luchadores más íntegros y consecuentes con la causa de los trabajadores durante los tiempos de la Revolución. Su pensamiento y su lucha inspiraron muchas de las conquistas obreras, y algunos derechos que quedarían recogidos en la Constitución Política Mexicana. Escritor prolífico, publicó cuentos, relatos y piezas teatrales, Obras Completas, reúne los artículos políticos publicados en el semanario Regeneración. 

Ricardo Flores Magón. Obras completas XII. Regeneración (1916), Coordinación, compilación, nota introductoria, cronología y anotación, Jacinto Barrera Bassols. Compilación y anotación, Alejandro de la Torre Hernández. Anotación, Juan Manuel Aurrecoechea. Conaculta. México, 2015. Pp. 317.