La industria farmacéutica en México apareció durante el periodo posrevolucionario, en una etapa llena de transiciones en la cual las formas tradicionales de medicación bajo los principios activos de las plantas medicinales se fueron abandonando para dar paso a un modelo nuevo de producción de medicamentos a través de fórmulas químicas de la síntesis orgánica de moléculas con efecto curativos.
Durante las últimas décadas del siglo XIX, las medicinas de patente, medicamentos elaborados dentro de laboratorios, y la especialidad farmacéutica hicieron su aparición en México. Estos nuevos medicamentos industriales, producidos principalmente en Estados Unidos y en países europeos, como Alemania, tenían la particularidad de llegar envasados y etiquetados con las instrucciones de administración y dosificación incluida, transformado las formas terapéuticas usadas en el tratamiento de enfermedades.
Este nuevo sector productivo hizo que las farmacias y boticas del país incluyeran cada vez más en su catálogo de venta este tipo de medicamentos, lo que trajo consigo el surgimiento de nuevas industrias, en su mayoría extranjeras, que establecieron laboratorios dedicados exclusivamente a la producción, importación y distribución de medicinas en México. Un ejemplo fue la compañía alemana conocida como Bayer, hoy en día una de las farmacéuticas más reconocidas a nivel mundial.
El 23 de junio de 1921, se estableció en México la sociedad colectiva comercial de los señores alemanes Federico Ricardo Weskott y Walter Matthis, formando la compañía denominada Química Industrial Bayer, Weskott & Cía, con la finalidad de vender productos químicos en el país con un capital inicial de 10,000 pesos. En 1926, la empresa cambió su razón social a Química Industrial Bayer, Meister, Weskott & Cía. Finalmente en 1937, Bayer tuvo una importante participación en el mercado mexicano, principalmente por la importación de la Aspirina, medicamento utilizado para tratar síntomas corporales como dolor, fiebre e inflamación. Posteriormente, se constituyó como la filial transnacional Casa Bayer S.A. dedicada a la fabricación, importación y exportación de productos químicos y farmacéuticos.
La importante participación de Bayer dentro del mercado mexicano, principalmente por la importación de la Aspirina, medicamento utilizado para tratar síntomas corporales como dolor, fiebre e inflamación, se constituyó como la filial transnacional Casa Bayer S.A. dedicada a la fabricación, importación y exportación de productos químicos y farmacéuticos.
A finales de los años treinta la Casa Bayer S.A. construyó su primera planta farmacéutica en la Ciudad de México, la cual se ubicó al norponiente, en la avenida Boulevard Miguel de Cervantes Saavedra, en la colonia Granada, convirtiéndose en la primera planta de producción en su género que se edificó en el país. Esto contribuyo a que Bayer comercializara cerca de 143 productos farmacéuticos, entre ellos la Neomelubrina; el Prontosil; la Insulina Bayer; el Tónico Bayer, sueros y algunas vacunas. Además del comercio en territorio mexicano, la compañía contempló la venta de productos a otros países de Latinoamérica para lo cual estableció sucursales en diversas naciones.
Dentro del Archivo General de la Nación, se encuentra el fondo Documentos de la Casa Bayer, el cual resguarda material que documenta la historia de la Casa Bayer, las cuales proporcionan información referente a la constitución y capital social de la compañía, desde el año de 1921, fecha en que inició sus operaciones en México, hasta el año de 1966.
Los documentos aportan interesantes datos en cuanto a los cambios de razón social; estatutos; aumentos de capital social; información sobre sus objetivos y estatutos; modificaciones en la escritura constitutiva por aumento del capital social y ampliación de los negocios comerciales de la Casa Bayer en Centroamérica; créditos; propiedades inmuebles; así como nombramientos de apoderados y gerentes.
