Chava Flores, como mejor fue conocido, nació un 14 de enero de 1920, en la Ciudad de México. Los primeros años del compositor y escritor los vivió en la calle de La Soledad, en el conocido barrio de la Merced, posteriormente, se conoció de su propia voz, que residió en más barrios y colonias populares como la Peralvillo; la San Rafael; la Guerrero; la Doctores; la Roma; Santa María la Rivera; Tacubaya y Azcapotzalco.

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En 1933, la repentina muerte de su padre lo llevó a probarse en varios oficios desde sus trece años, ejerció como sastre; mensajero; repartidor; cobrador; contador; comerciante y ferretero, todas estas ocupaciones implicaban nuevamente relacionarse con la movilidad de la ciudad. Finalmente logró asociarse con un amigo para echar andar una pequeña imprenta, la cual sin darse cuenta lo llevó a tener su primer contacto con la música, cuando en 1949, comienza a editar y dirigir la revista quincenal El Álbum de Oro de la Canción, donde aparecían las melodías de los artistas más populares en México.

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Su acercamiento con los compositores y artistas de la talla de Agustín Lara; Los Panchos; Toña la Negra; Alfredo Gil; Chucho Navarro; entre otros, despertó su inquietud por incursionar en la música y hacer sus primeras letras, así fue como en 1952 lanzó Dos horas de balazos, canción con la que se dio a conocer en la radio, a ésta le siguió Tertulia, ambas piezas grabadas por la compañía disquera RCV Records y con las cuales comenzó a adquirir gran popularidad al presentarse en centros nocturnos y teatros de la República Mexicana.

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El estilo musical de Chava Flores fue catalogado como ingenioso y divertido, con un lenguaje denominado completamente chilango que retrató la vida capitalina con icónicas melodías como: Sábado Distrito Federal; Boda de vecindad; El gato viudo; Mi chorro de voz; Llegaron los gorrones y A qué le tiras cuando sueñas mexicano, temas que muy pronto se arraigaron en el gusto de la gente, ganando fama en el resto del país y en el continente americano.

Con más de doscientos temas, en sus letras y música dedicadas a las vecindades, calles de la ciudad, pulquerías, mercados, tiendas y el transporte público reflejó su profundo conocimiento del folclor vivido en el antes conocido Distrito Federal, parodiando la manera del ser del mexicano, así como las costumbres del llamado México olvidado, valiéndole que el público lo conmiserada como “El cronista musical de la ciudad”.

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Su extensa carrera en la música le hizo acreedor a diversas distinciones entre las que se encuentran la Medalla Agustín Lara que otorgaba la Sociedad de Autores y Compositores de México y el busto colocado en la Plaza de los Compositores de la Ciudad de México. Chava Flores vivió sus últimos años en Morelia, Michoacán, pero cuando enfermó regresó a la capital del país en donde falleció el 5 de agosto de 1987, siendo recordado como un apasionado de la composición, la fotografía, las letras, el cine, el baile y la música. Buena parte de la letra de sus canciones, así como El Álbum de Oro de la Canción, se encuentran bajo el resguardo del Archivo General de la Nación, siendo parte del vasto acervo que el fondo Colección Propiedad Artística y Literaria registra.

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