Los principios de la Aviación Naval en México datan de 1918, cuando un biplano de modalidad anfibia construido en territorio nacional realizó su primer vuelo y acuatizaje exitosamente en el Puerto de Veracruz.

Más adelante, en 1926, se diseñaron hidroaviones mexicanos, lográndose fabricar una escuadrilla de 3 de ellos, pero con la problemática de no contar con personal que pudiera operarlos. El entonces Teniente Mayor Carlos Castillo Bretón fue capacitado en los Estados Unidos y en México, quedando al frente de la primera escuadrilla aeronaval.

Mediante el Decreto del Presidente Plutarco Elías Calles, el 15 de marzo de 1926 se publicó en el Diario Oficial de la Federación la creación del Cuerpo de Hidroaviones de la Armada Nacional. Desde entonces, las Águilas de la Armada garantizan la Soberanía Nacional, protegiendo los aires y mares mexicanos.

La Universidad Naval prepara a los Pilotos Aeronavales a través de sus Establecimientos Educativos Navales, capacitándolos con los más altos estándares de educación para llevar en alto el nombre de los predecesores que sentaron la bases de la Aviación Naval.