Tradicionalmente en las posadas, los anfitriones de la fiesta toman el papel de posaderos, mientras los invitados con velas encendidas, hacen la petición de alojamiento representando a San José y la Virgen María en busca de donde descansar, tocan la puerta y cantan los famosos villancicos, los anfitriones abren para dejar entrar a los peregrinos, después empieza la convivencia. Una vez ya adentro se acostumbra arrullar al niño y colocar los aguinaldos alrededor, mismos que al terminar son repartidos entre los niños como parte de las bendiciones por su nacimiento, se ilumina alrededor de este con luces de bengala que representa la luz de belén. En las posadas también se acostumbran las piñatas de estrella de siete picos, donde cada uno representa la lucha del hombre contra las pasiones o los pecados capitales en la religión cristiana: soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza, el palo representa la fuerza de la virtud que rompe con los falsos deleites del mundo, destruye el maleficio de las pasiones, golpeando y rompiendo la piñata, los colores brillantes representan la tentación del demonio y la fruta es el significado de la gracia de Dios.

El 24 de diciembre es la cena, y no puede faltar el ponche, la bebida de la temporada, así como el platillo más tradicional es el pavo, la costumbre de su preparación viene de la población cristiana desde el siglo XVI, Navidad era el mayor día de fiesta y se fue haciendo costumbre preparar el manjar más delicioso y a la vez rendidor para compartir con la familia.

¡TURISSSTE les desea una Feliz Navidad!