En la minuta sobre la segunda reunión de política monetaria de 2022, la cual ocurrió el pasado 24 de marzo, se estableció que la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad (5 miembros) elevar en 50 puntos base (pb) el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día, para ubicarla en 6.50%. Esto con el objetivo de ajustar la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a la meta de 3% hacia el primer trimestre de 2024.

Respecto a la actividad económica, la mayoría coincidió en que los indicadores disponibles sugieren que la reactivación económica podría haberse reanudado a inicios de 2022. Señala que se mantienen amplias las condiciones de holgura[i], pero que en el primer trimestre de 2022 serán menores a las del último trimestre de 2021. También reconoció que con las tensiones geopolíticas entre Rusia y Ucrania son una nueva fuente de incertidumbre para la economía nacional.

En cuanto a la inflación, la mayoría estuvo de acuerdo en que la inflación sigue presionada principalmente por factores globales asociados a la pandemia. Observó que la inflación subyacente muestra incrementos generalizados y que la no subyacente continúa experimentando presiones.

Todos mencionaron que las expectativas de inflación para 2022 y 2023 volvieron a incrementarse y especificaron que las de largo plazo se han mantenido estables en niveles superiores a la meta. Mientras que la mayoría indicó que las expectativas de mediano plazo para la inflación general aumentaron y que la convergencia puntual hacia el objetivo se retrasó, desde finales de 2023 hasta el primer trimestre de 2024.

Entre los riesgos al alza para la inflación, la mayoría destacó la persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados, presiones inflacionarias externas derivadas de la pandemia, mayores presiones en los precios agropecuarios y energéticos por el reciente conflicto geopolítico y presiones de costos.

Para las próximas decisiones de política monetaria, la mayoría coincidió en que “se vigilaría estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación y en sus expectativas. Ello con el objetivo de determinar una tasa de referencia congruente en todo momento tanto con la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3% en el plazo en el que opera la política monetaria, como con un ajuste adecuado de la economía y de los mercados financieros”. (Comunicado Banxico aquí)

 

[i] Un indicador muestra holgura cuando su nivel observado se encuentra por debajo de su nivel potencial, el cual se define como el nivel consistente con una inflación estable, indicando así una contribución a una menor inflación. Por el contrario, cuando el nivel observado del indicador se encuentra por encima de su nivel potencial, hay indicios de presiones inflacionarias.