Con el propósito de fortalecer los niveles de seguridad y certeza en la importación, exportación y movilización de productos agroalimentarios, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), analiza su marco jurídico para proponer su actualización conforme a los criterios establecidos en los protocolos de los países con los que México tiene acuerdos comerciales.
El director en jefe del SENASICA, Enrique Sánchez Cruz, aseguró lo anterior durante la reunión de trabajo que sostuvo con integrantes de la Organización de Porcicultores del País (OPORPA), en la cual los productores acordaron participar en la integración de propuestas para modernizar las leyes en materia de sanidad e inocuidad, a fin de dar mayor protección a la producción agroalimentaria.
El funcionario de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), precisó que México cuenta con una regulación de sanidad e inocuidad que “armoniza muy bien con otras del mundo, como la japonesa”.
Comentó que las propuestas de modificación a la normativa mexicana que realizan los expertos del SENASICA están encaminadas a propiciar que las autoridades sanitarias de otros países reconozcan los sistemas de inspección, vigilancia y certificación mexicanos para agilizar el intercambio de agroalimentos con los principales socios comerciales.
En el encuentro, los integrantes de la OPORPA presentaron un Anteproyecto de Sanidad Porcina que consiste en un sistema de vigilancia y control para implementarlo de manera coordinada con autoridades federales, estatales y municipales, a fin de enfrentar contingencias que pudieran presentarse por enfermedades que afectan a los cerdos.
El plan propuesto por los porcicultores considera mejorar el estatus sanitario de las mil 85 unidades de producción porcina tecnificadas y los más de mil 800 predios de traspatio.
El presidente de OPORPA, Heriberto Hernández, indicó que se proyecta establecer un programa de auto - reemplazo de cerdas reproductoras en todas las granjas tecnificadas en Jalisco; promover la certificación de los centros de transferencia genética que producen o envían semen a las granjas de la entidad; mejorar sus parámetros productivos a través del control de enfermedades, entre otros aspectos.
Comentó que el plan también contempla la regionalización del Estado de Jalisco, constatación de granjas, capacitación a productores y la creación de centros de lavado en puntos estratégicos.
Aclaró que el proyecto de sanidad fue presentado con la aprobación de los presidentes de las uniones de porcicultores de Aguascalientes, Colima, Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Puebla, Sonora y Veracruz —que en su conjunto representan 80 por ciento de la movilización de la producción nacional—, con el propósito de afrontar las enfermedades de alto impacto económico en la industria y potenciar la productividad.
Sánchez Cruz recibió el plan de trabajo y señaló que representa una alternativa más para evitar la presencia de enfermedades que afectan a los cerdos como la fiebre porcina clásica, de la cual México fue declarado país libre desde 2015.