El trigo se cultiva desde hace miles de años en todo el mundo, existen vestigios de su presencia en civilizaciones como Egipto y Mesopotamia (actual Irak y Siria) en el oriente medio. El trigo llegó a nuestro país gracias a los colonizadores y se ubicó como uno de los principales cereales para la alimentación en la Nueva España, junto con el maíz.

Así, el trigo se ha cultivado en México desde hace más de 500 años y alrededor de 80 % de su producción se destina a la elaboración de pan. Es el estado de Sonora el principal productor, seguido de Baja California, Guanajuato, Sinaloa, Michoacán, Chihuahua, Jalisco y Tlaxcala.

Las exportaciones de trigo de nuestro país se destinan principalmente a Estados Unidos, Argelia, Italia, Turquía, India, Egipto y Chile.

Para preservar el cultivo, el SENASICA opera una campaña permanente que mantiene bajo estricta vigilancia epidemiológica a plagas como el carbón parcial del trigo o la roya negra. El trigo cosechado en México es de primera calidad y lo puedes disfrutar en cereales, pastas, sopas, hotcakes, pero sobre todo en deliciosos bizcochos y pasteles que deleitarán tu paladar.