La Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM organizó una conferencia virtual.

En el marco de la conmemoración del Día Mundial sin Tabaco, la doctora Carmen Fernández Cáceres, directora general de Centros de Integración Juvenil, presentó la conferencia “Tabaco y drogas emergentes entre adolescentes”, organizada por la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México.

El licenciado Cuauhtémoc Solís Torres, director de Normatividad y Desarrollo Humano de la Dirección General de Servicios Médicos (DGSM) de la UNAM, y la licenciada Itzel Hernández Fernández, representante de la DGSM, presentaron a la ponente y moderaron el evento virtual.

La doctora Fernández informó que en el mundo existen mil 300 millones de fumadores, la mayoría de ellos son hombres; asimismo, destacó que la pandemia por COVID-19 ha cobrado la vida de 3.5 millones de personas, sin embargo, el tabaco ocasiona la muerte de más de 8 millones de personas cada año, tan sólo en México, más de 51 mil muertes son atribuibles al consumo de tabaco anualmente.

Señaló que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT) 2016-2017, existen 684 mil fumadores; a su vez la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes (ENCODE) 2014, revela que 6.5 por ciento de los niños de primaria ha fumado tabaco, así como 20.8 por ciento de los adolescentes de secundaria y 46.2 por ciento de los jóvenes de bachillerato.

Resaltó que el consumo de cigarro es un factor de riesgo común para seis de las ocho principales causas de muerte y ocasiona entre 80 y 90 por ciento de las enfermedades de cáncer. Agregó que el costo en salud para atender padecimientos derivados del uso de cigarro es de 95 mil millones de pesos, y en impuestos se recaudan 43 mil millones.

Expuso que la industria tabacalera ha buscado atraer a más jóvenes a través de la venta de productos novedosos y atractivos, como los cigarrillos electrónicos, cuyo uso es igualmente perjudicial para la salud, pues incluyen más de 20 sustancias potencialmente dañinas en cantidades superiores a los cigarros convencionales. También se han utilizado las redes sociales, a través de influencers o celebridades, para promocionar productos de tabaco y vapeo.

La especialista afirmó que superar la adicción al tabaco no es fácil, sin embargo los beneficios de dejar de fumar son prácticamente inmediatos, pues a los 20 minutos se reduce la tensión arterial y la frecuencia cardiaca; a las 12 horas el nivel de monóxido de carbono en el torrente sanguíneo vuelve a la normalidad; entre la segunda semana y los tres meses mejora la circulación y la función pulmonar, y en un año el riesgo de infarto se reduce a la mitad.

Añadió que 74 por ciento de las personas que fuma quiere dejar de hacerlo, pero sólo 30 por ciento tiene acceso a los medios para dejarlo. En ese sentido invitó a sumarse al Reto para dejar de fumar que promueve CIJ; explicó que el objetivo es que las personas inviten a sus amistades o conocidos que fuman a contestar un breve test para identificar su nivel de consumo y motivarlos a registrarse y recibir atención especializada. Quien tenga la mayor cantidad de personas inscritas en el sistema para recibir tratamiento, recibirá un premio de 5 mil pesos en efectivo; el segundo lugar, 3 mil pesos; y el tercer lugar, 2 mil pesos.

En cuanto al uso de drogas emergentes, señaló que la Organización de las Naciones Unidas, hasta diciembre de 2020, había detectado mil 47 nuevas sustancias psicoactivas en el mundo, principalmente estimulantes (36 por ciento), cannabinoides sintéticos (31 por ciento) y alucinógenos clásicos (15 por ciento). Agregó que aunque no son nuevas, se le agregan sustancias para hacerlas más adictivas, y al no ser controladas por las convenciones internacionales las hace más peligrosas y ocasionan daños más severos a la salud. Explicó que causan efectos secundarios como agitación, convulsiones, agresión, psicosis aguda y dependencia.

Agregó que estas sustancias se difunden a través de las nuevas tecnologías y redes sociales para llegar a nuevos compradores, y alertó que su consumo se ha sexualizado, lo que se conoce como Chemsex, no obstante, explicó que esta asociación de uso de sustancias y prácticas sexuales deriva en el desarrollo de tolerancia y a su vez genera una gran dependencia y graves consecuencias a la salud.

Para concluir, detalló que, entre los pacientes atendidos en CIJ en el segundo semestre de 2020, las drogas ilícitas de mayor consumo fueron cannabis (81.4 por ciento); metanfetaminas (49.1 por ciento), y cocaína (45.9 por ciento).

Finalmente, la doctora Fernández indicó que se brinda atención especializada, de manera presencial, en las 120 unidades operativas del país, y a través del servicio de atención psicológica en línea por medio del WhatsApp.