MODERADOR: Damos la más cordial bienvenida a las autoridades que nos acompañan en el presídium

Licenciado Rutilio Escandón Cadenas, gobernador constitucional del estado de Chiapas.

Maestro Zoé Robledo, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Enfermera Rebeca Vázquez Jiménez, personal médico de la Unidad Médica Rural.

Maestra Victoria Rodríguez Ceja, subsecretaria de Egresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Doctor Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud.

Ciudadano Abel Trejo Hernández, voluntario del programa IMSS-Bienestar.

Doctora Gisela Lara Saldaña, titular de la Unidad del programa IMSS-Bienestar.

Doctor Miguel Ángel Palacio Castro, director del Hospital Rural Guadalupe Tepeyac.

Maestra Angélica Ivonne Cisneros Luján, comisionada nacional de Protección Social en Salud.

Licenciado Jorge Luis Escandón Hernández, presidente municipal de Margaritas, Chiapas.

Doctora Asa Cristina Laurell, subsecretaria de Integración y Desarrollo del sector salud.

Doctor Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.

Verónica Michel Gutiérrez, asesora técnica de Hacienda y Crédito Público.

Maestro Luis Antonio Ramírez Pineda, director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.

Maestro Juan Antonio Ferrer, titular del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar.

Doctor Víctor Hugo Borja Aburto, director de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Y doctor Alejando Calderón Alipi, responsable de Salud Región Sur.

Asimismo, damos la bienvenida a las autoridades federales, estatales y municipales, sociedad civil, así como a los representantes de los medios de comunicación.

Todos ustedes sean bienvenidos.

A continuación, escucharemos el mensaje de bienvenida a cargo del licenciado Rutilio Escandón Cadenas, gobernador constitucional del estado de Chiapas.

RUTILIO ESCANDÓN CADENAS, GOBERNADOR DE CHIAPAS: Licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.

Bienvenido aquí, a Guadalupe Tepeyac, del municipio de Margaritas. Muchas gracias.

Maestro Zoé Robledo Aburto, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social. Muchas gracias.

Doctor Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud. Muchísimas gracias, doctor.

Licenciado Jorge Luis Escandón Hernández, presidente municipal. Muchas gracias.

Agradezco a todas y a todos los servidores públicos que están aquí, federales, estatales; agradezco también muchísimo la presencia de todas y de todos.

También quiero agradecer la presencia aquí del secretario de Salud estatal, que está aquí con nosotros, también el director del Isstech, que está aquí con nosotros; el delegado del Issste, aquí está también con nosotros, por allá. Muchas gracias.

Saludo y agradezco también a todas las enfermeras, a todos los doctores, a todos los trabajadores del Seguro Social y del sistema de salud de Chiapas. Muchas gracias.

Es un honor tener aquí a un gran amigo, al mejor aliado de Chiapas, al presidente de la República, un hombre auténtico que sigue caminando con la gente y sobre todo con la gente más humilde, con la gente más pobre de aquí del estado de Chiapas.

Porque el presidente es un hombre que ha escuchado durante muchísimos años todas las propuestas más sensibles del pueblo. Por eso a nosotros nos da mucho gusto que no haya declinado nunca en su lucha para sacar adelante a Chiapas y para también sacar adelante los problemas más grandes de toda nuestra nación mexicana.

Muchas gracias, señor presidente, por no desistir de esa gran lucha que dio por tantos años el pueblo de México y de Chiapas, se los agradecemos.

¡Viva el presidente Andrés Manuel López Obrador!

Muchísimas gracias.

MODERADOR: Solicitamos al ciudadano Abel Trejo Hernández, voluntario del programa IMSS-Bienestar, nos dirija un mensaje.

ABEL TREJO HERNÁNDEZ, VOLUNTARIO DEL PROGRAMA IMSS-BIENESTAR: Tengan muy buenos días, compañeros que nos acompañan en esta mañana calurosa.

Estamos contentos que tenemos aquí al presidente de la República, que se ha acordado de nosotros aquí en estas comunidades, como antes lo han mencionado.

Estamos contentos porque sabemos que nosotros como voluntarios de salud, que somos de nuestras comunidades, es un gran honor convivir un rato con él y que sepa un poquito del trabajo, y conocer un poco la historia cuando nada más vino este hospital aquí, en Guadalupe Tepeyac.

Yo recuerdo que era chamaquito cuando vino. Y cuando llegó no había carretera allá en mi comunidad -nosotros vivimos aquí en nexo La Esperanza- no había camino, tenían que entrar caminando los médicos para que nos pusieran la vacuna.

Y recuerdo que corríamos, pero no había cómo escondernos porque de todos modos se quedaban allá, y nos vacunaban. Recuerdo que ellos empezaron a decirnos cómo era el método para poder vivir mejor, para que no nos enfermáramos, mejor los médicos.

Yo sé que tengo poquito tiempo, pero voy a tratar de resumirlo en pocas palabras. Nos enseñaron a planificar, a que nuestros niños llevaran las vacunas adecuadas para evitar algunos tipos de enfermedades que puedan surgir en nuestras comunidades.

También cuidamos que tomen agua hervida, cuidamos que tengan sus vacunas los niños, cuidamos a los diabéticos, cuidamos y vigilamos el tratamiento de algunas enfermedades que a veces por lectura no entendemos, pero tenemos un volante de derivación aquí que nos dan, y por medio de eso, por detrás nos mandan una correspondencia según al tipo de medicamento que algún enfermo pueda necesitar y con gusto lo hacemos.

No tenemos ningún pago que nos hagan, pero lo hacemos con voluntad, con esa emoción.

Nosotros somos campesinos. Aquí en esta región no tenemos otro trabajo más que ser campesino y ahí tenemos accidentes.

También estamos capacitados para suturar, para no generar gasto, porque somos de bajos recursos.

Y me despido, señor presidente de la República con esta frase que tenemos aquí en nuestras comunidades: Mirando siempre por delante y nada por detrás.

Que Dios les bendiga.

Que tengan feliz retorno en el estado de Chiapas.

MODERADOR: Enseguida hace uso de la palabra la enfermera Rebeca Vázquez Jiménez, personal médico de la unidad médica rural.

REBECA VÁZQUEZ JIMÉNEZ, ENFERMERA DE LA UNIDAD MÉDICA RURAL: Antes que nada, muy buenos días.

Presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Guadalupe Tepeyac está de gala. Quiero decirle, señor presidente, que el estado de Chiapas lo espera y lo quiere con los brazos abiertos.

Director general del IMSS, ciudadano chiapaneco.

Reciba usted un cordial saludo, gobernador del estado de Chiapas.

Mesa del presídium, público en general.

Muy buenos días.

Me presento. Mi nombre es Rebeca Vázquez Jiménez, enfermera de UMR Lázaro Cárdenas, región fronteriza, orgullosamente chiapaneca.

Me siento orgullosa de pertenecer al programa IMSS-Bienestar. IMSS-Bienestar engloba todo: salud, atención, cortesía y más que nada, humanismo, entrega hacia la población.

Me cabe mencionar también que es muy bonito llevar el profesionalismo muy dentro y llegar a las comunidades más lejanas a ofertar los servicios con calidad y calidez.

Quiero mencionar que IMSS-Bienestar mantiene muchas prioridades preventivas, dentro de ellas: diabetes mellitus, hipertensión arterial, enfermedades crónicas degenerativas, que de nosotros como personal de salud depende una mejor calidad de vida, porque son enfermedades que a largo plazo puede afectar la calidad de vida del paciente como de la familia.

Quiero decirles que es un compromiso moral, es una entrega profesional, hacer de ella una mejor calidad de vida a nuestros pacientes, dentro de tantos talleres que nosotros ofertamos, lo que es en la adolescencia evitar el embarazo de alto riesgo, grupos prioritarios para IMSS-Bienestar.

Pertenecer a IMSS-Bienestar es un orgullo y una satisfacción, pero más que nada es una entrega total. Así lo veo y así quiero que se mantenga siempre.

En nombre del personal de enfermería de la Región Tres fronteriza, señor presidente de la República, reciba un fuerte abrazo y un cordial saludo.

Y quiero exportar a todos, quiero conducir, ser portavoz de todos, que hoy en día IMSS-Bienestar es una institución y tenemos la esperanza en el presente y en el futuro mantenerse con la calidad de los servicios que así lo otorga.

Sabemos y estamos seguros, señor presidente, director general del IMSS, que IMSS-Bienestar se mantendrá con su apoyo y haremos llegar los servicios en la mejor calidad posible hacia las comunidades más aledañas de nuestra región, de nuestro estado y, ¿por qué no decirlo?, de todo México, porque tanta calidad de vida merece el paciente y de nosotros muchas veces depende, porque es un programa preventivo y en nuestras manos está con mucho gusto nosotros tenemos la oportunidad de ofertarlo.

No me resta más que decirle que Dios lo bendiga, que tenga mucha suerte, muchos éxitos. Lo admiro por su lucha al llegar al poder. Sabemos que México está en buenas manos.

Que Dios me lo bendiga. Y muchos éxitos, señor presidente.

Buenos días.

MODERADOR: A continuación, el doctor Miguel Ángel Palacio Castro, director del Hospital Rural Guadalupe Tepeyac, nos dirigirá un mensaje.

MIGUEL ÁNGEL PALACIO CASTRO, DIRECTOR DEL HOSPITAL RURAL GUADALUPE TEPEYAC: Señor presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Bienvenido a esta su casa.

La verdad, la descripción de la enfermera Rebeca de lo que es el personal del programa no hay mucho más que agregarle. El personal es un personal que se compromete desde un inicio, se entrega para la atención de la población.

Estamos sumamente orgullosos de ser parte también del Instituto Mexicano del Seguro Social, quien a través de su normativa nos ha guiado perfectamente. Desde luego que el programa nos pide lo propio, pero es la parte normativa lo que nos lleva también en el camino.

En un hospital como este donde se concentran las actividades de segundo nivel, donde tenemos las especialidades, estamos en una interrelación continua con el primer nivel de atención. En este caso tenemos 34 unidades médicas rurales que derivan hacia acá con nosotros; además de las unidades médicas de la Secretaría de Salud, los Cessa, que tienen cercano, los centros de salud, las caravanas.

Y tenemos una interrelación muy cercana con el personal voluntario, es la parte más fuerte de nuestro programa el personal voluntario, como escucharon a don Abel. Entonces, toda esa interrelación, donde nosotros recibimos los pacientes de parte de ellos, si los atendemos y se los regresamos con indicaciones, lo mismo sucede en el sistema de referencia entre un hospital de segundo nivel, como este y los de primer nivel como las unidades médicas rurales.

Desde luego que se requiere un reforzamiento en la atención en el primer nivel con los medicamentos, para que este sea lo necesario y suficiente para atender a la población que así lo demanda.

En este hospital hemos tratado de tener lo necesario también para atender a la población ya que no podemos enviarlo aquí cercanamente a comprar en alguna farmacia, que son servicios con los cuales no se cuenta en esta localidad; por lo tanto, debemos de resolver la mayoría de las patologías incluyendo los pacientes más críticos en este hospital, porque la población no tiene recursos para derivarlos a otro lugar.

Este hospital debe de ser resolutivo. Por lo tanto, se requiere de mayor infraestructura aquí para poder ser capaces de otorgar a la población lo que está demandando.

En relación al problema que nos puede afectar constantemente, que es las alteraciones en el flujo eléctrico, eso provoca que todas las tardes cuando la gente utiliza la electricidad baja la energía, tiene que entrar en funcionamiento las plantas de emergencia y esos fallos generan daños en los equipos médicos de manera regular, lo que nos puede comprometer la atención de los pacientes.

Aun cuando contamos con una planta de emergencia para sustituirla, cuando esta falla pone en riesgo los pacientes que tenemos entubados, los pacientes críticos, los que están consumiendo oxígeno.

Sí se requiere del apoyo para el hospital por su ubicación y por supuesto que es todo en beneficio de nuestra población.

Nosotros como trabajadores brindamos todo lo que nos corresponde, pero no sólo es suficiente, se requiere de recursos para otorgar lo mejor que así requiere la gente.

Bienvenido, señor presidente.

Esperamos que su visita sea de mucho beneficio para nosotros.

Gracias a todas las autoridades que nos acompañan, ahí a nuestro señor delegado también que nos acompaña.

Muchas gracias por estar pendientes de nosotros.

Al gestor aquí que tenemos, que es nuestro jefe inmediato pero que no deja de estar gestando siempre para que nosotros tengamos lo necesario.

Y desde luego que esa presión que tenemos de parte de nuestros jefes a nivel institucional es lo que hace que este programa funcione.

Muchísimas gracias.

MODERADOR: Solicitamos al maestro Zoé Robledo, director general del Instituto Mexicano del Seguro Social nos dirija un mensaje.

ZOÉ ROBLEDO ABURTO, DIRECTOR DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL: Muchas gracias y muy buenos días a todas y a todos.

Con su permiso, señor presidente.

Señor gobernador, un gusto siempre estar acá en nuestra tierra.

Y también quiero saludar al presidente municipal, Jorge Luis Escandón, porque además ha sido un gran aliado de este hospital y estamos seguros de que lo va a seguir siendo.

Quiero ser muy breve. Además de saludar a los compañeros del gobierno federal, obviamente al doctor Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud; a Victoria y a Verónica, de la Secretaría de Hacienda; a Juan Ferrer, del Instituto de Salud para el Bienestar; y desde luego a todo el personal, a todas las cabezas del sector salud que hoy nos acompañan, Antonio Ramírez, del Issste.

Aquí está la inteligencia médica del gobierno.

Y creo que es muy simbólico estar aquí hoy y comenzar una gira sobre salud universal en un lugar como Las Margaritas, aquí, en Guadalupe Tepeyac. Describe mucho de lo que es la Cuarta Transformación de la vida pública de nuestro país. Es un gobierno y su presidente que no espera que le digan cómo están las cosas, sino que acude a la realidad, a enfrentarla, a entenderla y a hablar con la gente, que empieza en lo más apartado y no en el centro de la ciudad, no en los lugares en donde las cosas andan bien y de las cuales estamos orgullosos que estén bien, porque hay muchos avances, sino acá, en donde muchas veces la mano de Dios no llega, menos la del gobierno. Ahora ya no es así.

Creo que no optar por los lugares donde las cosas andan, está pavimentadito, es una demostración de lo alto de las metas que nos estamos poniendo.

Y si hemos dicho siempre que por el bien de todos primero los pobres, pues también tiene que ser en materia de salud.

Déjenme decirles que, revisando las cosas del Seguro Social en este mes y algunos días que llevó como director, veía yo que había una casi obsesión de los exdirectores, de muchos de ellos, de decir: ‘Hay que mantener las finanzas sanas’

Pero ¿cómo vamos a tener finanzas sanas con derechohabientes enfermos o con beneficiarios enfermos o con instituciones e institutos completos que pueden estar con alguna suerte de enfermedad?

Pues no debe de ser más así. Por eso hoy estar aquí en este hospital rural de IMSS-Bienestar llena de emoción y de mucha esperanza, porque usted nos ha escuchado, presidente, a Abel como voluntario, a Rebeca como enfermera, al director general, y a todos los que están aquí hoy de diferentes municipios y de diferentes comunidades.

Pero los escucho también allá en Nuevo Momón, a la gente que decía que nuestra unidad médica rural de allá no tiene el tiempo suficiente la doctora atendiendo, pues hay que revisarlo.

O acá en Vicente Guerrero, lo mismo, porque eso es el IMSS-Bienestar, es estar en el territorio, es trabajo colectivo por encima del individualismo, es hacer las cosas por convicción y no por conveniencia.

Creo que aquí se tienen que empezar a pensar nuevamente en valores que se perdieron en los últimos años, el valor de la confianza, el valor de acuerdos y la palabra empeñada que se cumple. El valor de asumir compromisos, no porque sea fácil, sino porque es necesario.

Hoy aquí los médicos residentes, las enfermeras, los conductores de las UMM, los médicos, los radiólogos, todos, estoy seguro, están comprometidos no solamente porque lo han hecho, sino porque saben que lo pueden hacer mejor, que lo pueden seguir haciendo; y que este puede ser un modelo que no solamente atienda a una población tan emblemática como Guadalupe Tepeyac y Las Margaritas, sino que en cada unidad médica rural sea lo mismo, la misma calidez, la misma calidad, el mismo tiempo, el mismo servicio.

Es un reconocimiento también al conocimiento ancestral. Por eso le decía yo aquí al director y a la titular del programa, a la doctora Gisela Lara, es cierto, se ha ido perdiendo el uso del tojolabal, pero no debe de ser pretexto para nosotros para que todas nuestras unidades en población indígena tengan la traducción de nuestro idioma original. Por eso, director, le pido que hay que hacer ese de cambio de manera inmediata.

Este hospital lleva mucho tiempo, lleva muchos años, lleva mucho tiempo también de resistencia y de trabajo, antes, quizá, como lo decía Abel, era el único; hoy podemos decir que es de los mejores que hay aquí en la región.

Por eso, presidente, nos llena de orgullo estar aquí hoy con usted, y sobre todo con todos. El personal de IMSS-Bienestar, que todos los días hace posible que como en un rato, como seguramente hasta acá se escuchará el llanto de un chiapaneco que está por nacer, nos sentamos orgullosos de eso.

Muchas gracias.

MODERADOR: Damas y caballeros.

Escuchemos el mensaje que nos dirige el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Guadalupe Tepeyac, de comunidades, ejidos de Margaritas y de otros municipios de esta región de Chiapas.

Esta es la tercera vez que visito Guadalupe Tepeyac, tres veces. Ya les voy a explicar cuando vine las dos veces anteriores.

Primero, decirles que estoy muy contento de estar aquí con ustedes. Como decía Zoé, estamos recorriendo como siempre los pueblos y atendiendo a la gente más necesitada, más pobre. Estamos, desde luego, atendiendo a todos, escuchando a todos, respetando a todos, garantizando las libertades; pero el gobierno que encabezo tiene el compromiso de darle preferencia a la gente humilde. Por el bien de todos primero los pobres. Ese es el propósito, la doctrina, la filosofía del nuevo gobierno.

Quiero comentarles que vamos bien, llevamos un poco más de siete meses y se va avanzado y ya estamos dando respuesta a las necesidades de la gente y a los compromisos que hicimos desde hace muchos años, porque tardamos muchos años luchando para llevar a cabo un cambio verdadero, una transformación.

No se trata de llegar a ocupar el cargo, no fue eso lo que nos movió y nos llevó a luchar muchos años; no es el cargo, es el encargo, es la transformación de México.

No es el poder por el poder o el ‘quítate tú, porque quiero yo’. Es llevar a cabo ideales, principios. Llevar a cabo una transformación.

Sólo ha habido en la historia de México tres transformaciones:

El movimiento de Independencia. Cuando México se convirtió en un país libre, luego de estar dominado por España durante 300 años, tres siglos, pues se llevó a cabo ese movimiento encabezado por dos curas buenos, rebeldes, Hidalgo y Morelos, y se logró la independencia de México. Esa fue la primera transformación.

La segunda fue un movimiento que encabezó el presidente Benito Juárez, el mejor presidente que ha habido en la historia de México, un indígena zapoteco. Esa fue la segunda transformación.

Porque los conservadores de entonces no querían los cambios y ya cuando estaban perdidos se atrevieron a ir al extranjero y trajeron a un príncipe, a Maximiliano y a la emperatriz Carlota, para que dominara México. Y Juárez y los liberales no lo permitieron, resistieron, nos invadió en ese entonces el ejército más poderoso del mundo, el ejército francés, pero por esa perseverancia de Juárez, esa fe que tenía en la causa que defendía se logró expulsar a los extranjeros, se restauró la República. Esa fue la segunda transformación.

Y la tercera fue la Revolución de 1910, porque Porfirio Díaz llegó a la presidencia y se quedó 34 años en el poder, se convirtió en un dictador y se esclavizó al pueblo.

Por eso surgió el movimiento revolucionario y cambiaron las cosas, desde luego, porque hay insensatos que dicen que estábamos mejor en la época de Porfirio Díaz. Eso no es cierto.

Con la Revolución se avanzó, porque se entregó la tierra a los campesinos, se mejoraron las condiciones laborales. Con Porfirio Díaz se tenía que trabajar 16 horas diarias, no había día de descanso.

A partir de la Revolución ocho horas, día de descanso y otras prestaciones, claro que se avanzó.

Además, Porfirio Díaz había entregado las riquezas de México a extranjeros. Con la Revolución se recuperaron esas riquezas, las minas, el petróleo, los ferrocarriles. Entonces, sí se avanzó. El Seguro Social se creó después de la Revolución.

Tres transformaciones ha habido, repito: Independencia, Reforma, Revolución; pero ahora hacía falta otra transformación, porque se fue echando a perder el régimen y el gobierno fue secuestrado, tomado, se convirtió en un comité al servicio de una minoría rapaz, se dedicaron a saquear a México y se abandonó a nuestro pueblo.

Por eso se llevó a cabo un cambio. El año pasado la gente dijo: basta. Y se inició una nueva etapa y es lo que nosotros llamamos la Cuarta Transformación de la vida pública de México. Y lo digo así, lo explico para que no se piense qué es más lo de lo mismo, que fue nada más cambio de gobierno. No, es cambio de régimen, se acaba la corrupción, se acaba la impunidad. Me canso ganso.

Y ya empezamos. Les puedo decir que los de mero arriba, pero los de la punta del cerro, la punta de la pirámide, los potentados no pagaban impuestos o si pagaban se les devolvía, había condonación de impuestos, miles de millones de pesos.

Pagaban impuestos todos los mexicanos prácticamente, porque hasta la gente humilde cuando compra una mercancía ahí va incluido un impuesto; pagan impuestos los trabajadores, los comerciantes, los empresarios, pero había un grupo, los dueños de México, los que se sentían los amos y señores que no pagaban impuestos. Eso ya terminó.

Ya firmé un decreto en donde se acaban las condonaciones de impuestos para los llamados grandes contribuyentes.

¿Qué significa esto?

Que va a haber más recaudación de impuestos porque ya no existen estos privilegios.

Les pongo otro ejemplo. Llegamos y encontramos que se robaban gasolina y diésel, combustible, el famoso huachicol, porque los ductos por los que se transporta la gasolina eran perforados, eran ordeñados, había tomas clandestinas.

¿Saben cuánto se robaban diariamente?

Ochocientas 800 pipas, eso se robaban.

¿Cuánto significa esto en dinero? ¿Cuánto representó el año pasado este robo de 800 pipas diarias?

Sesenta y cinco mil millones de pesos, era lo que se robaban y con el consentimiento cuando menos de los altos funcionarios públicos, porque se detectaba el robo, tenían sistemas para ver cuándo bajaba la presión de un ducto y ahí se sabía que había una toma y sonaba una alarma en la oficina principal de Pemex en la Ciudad de México, en el piso 3 de la Torre de Pemex.

Sonaba la alarma, pero ahí podía estar sonando la alarma un día completo, dos días y nadie hacía nada, porque se hacían de la vista gorda. Se acabó eso. Dijimos se acaba el huachicol, no va a haber huachicol ni arriba ni abajo.

¿Y ahora qué hicimos? ¿Qué se logró?

No fue fácil, porque quisieron jugar a las vencidas, hubo sabotaje, rompían los tubos para ver si nos quedábamos sin gasolinas en las ciudades y dábamos marcha atrás.

La gente se portó muy bien, aguantó dos, tres semanas, que se tenían que hacer cosas para poder cargar gasolina, pero el pueblo nos respaldó.

¿Qué se logró ahora?

Ya se redujo ese robo, no se ha terminado por completo porque estaba bien enraizado, pero ya no se roban las 800 pipas diarias, ahora bajamos a 40 diarias.

¿Cuánto es lo que disminuyó el robo?

Noventa y cinco por ciento.

¿En dinero cuánto nos vamos a ahorrar si seguimos así este año?

Cincuenta mil millones de pesos.

¿Y todo ese dinero para qué se va a usar?

Para beneficio del pueblo. Por eso les digo vamos bien, la corrupción no sólo hay que acabarla por razones de índole moral, hay que acabarla porque es mucho lo que se va a unas cuantas manos, lo que se pierde, lo que se va por el caño de la corrupción.

Si se acaba con ese mal el presupuesto alcanza y rinde, es no permitir la corrupción y también acabar con los lujos en el gobierno. Ya no es como antes.

El presidente tenía ocho mil elementos para cuidarlo, había el llamado Estado Mayor Presidencial, ocho mil elementos para cuidar al presidente; pues ya todos esos elementos pasaron a la Secretaría de la Defensa, a la Guardia Nacional para cuidar al pueblo. Al presidente lo cuida la gente y el que lucha por la justicia no tiene nada que temer.

No voy a andar con guardaespaldas, eso es un cambio.

Ya también no hay aviones privados, ni helicópteros privados, se compraron un avión presidencial los anteriores, un avión de 25 metros de ancho, por 70 de largo, para 280 pasajeros, nada más imagínense, en un camión grande entran cuando mucho 50 pasajeros, y este avión es para 280 y no van a ir apretados como van en el camión, mucho menos en la combi. Tiene restaurante, alcoba. Un avión que no lo tiene ni Donald Trump.

¿Dónde está ese avión ahora?

Allá en California se está vendiendo. Yo no me voy a subir a ese avión porque no le voy a faltar el respeto al pueblo de México. No puede haber gobierno rico con pueblo pobre. Y ya no sólo ese es avión, 73 aviones y helicópteros. Usaban los helicópteros hasta para ir a jugar golf. Ya no hay nada de eso.

Hablando de salud, los altos funcionarios públicos tenían atención médica privada.

¿Saben cuánto costaba eso, darles la atención médica a los altos funcionarios públicos?

Cinco mil millones de pesos al año del presupuesto. Ya no hay eso. Ahora se están ahorrando esos cinco mil millones de pesos. No podíamos permitir que se dieran estas atenciones de privilegio, se hacían hasta cirugía plástica, se estiraban a costillas del erario. Ya eso se terminó.

Y aquí podría pasarme todo el día explicándoles.

¿Saben cuánto era la pensión de los expresidentes?

Cinco millones de pesos mensuales a cada uno. Por eso están algunos nerviosos, quisquillosos y enojados, pues ya no hay pensión millonaria para los expresidentes. Todo eso se terminó. Y eso nos permite tener presupuesto suficiente y ya estamos entregando más apoyos al pueblo, porque antes todo se quedaba en el gobierno, y el presupuesto es dinero del pueblo.

Era un gobierno mantenido y bueno para nada. Ahora es que el presupuesto vaya a la gente y le llegue al ciudadano de manera directa, porque ese es otro cambio, ya no es mandarles el apoyo a través de organizaciones, a través de intermediarios. No es así de que: ‘A ver, dame a mí el dinero, porque yo soy de la Organización Independiente Belisario Domínguez y yo voy a repartirle el dinero a la gente’. No, primo hermano, así no, porque así no llega.

Desde la Tesorería de la Federación al beneficiario con su tarjeta, porque si se manda con intermediarios, o no llega o no llega completo, llega con moche, con piquete de ojo.

Ya eso se terminó. Va el apoyo de manera directa.

Ya así los adultos mayores ya están recibiendo su apoyo y todos van a recibir su apoyo.

Y voy a cumplir el compromiso que hice de que se aumenta al doble, antes eran mil 160 pesos cada dos meses, ahora dos mil 550 pesos para los adultos mayores.

Y para todos, porque antes no se le entregaba ese apoyo al jubilado, al pensionado del Issste, del Seguro, ahora es universal.

Y también para satisfacción de todos es importante decirles que las niñas, los niños con discapacidad, todos, las niñas, niños con discapacidad de Chiapas van a tener su pensión igual que la de los adultos mayores, dos mil 550 pesos de pensión.

Continúan las becas. Estamos ordenando, nada más que hay inquietud de que ya no está el Prospera o ¿cómo se llama?, el Prospera.

Se va a entregar todo el apoyo, nada más que de manera directa, van a tener becas todos los niños pobres de primaria, de secundaria.

En el caso de la preparatoria, el nivel medio superior, todos, sus becas, todos los que estén estudiando, ya sea Colegio de Bachilleres, ya sea escuelas técnicas, escuelas preparatorias, mil 600 pesos bimestrales para todos los que están en el nivel medio superior.

Los que estén estudiando, que hayan logrado llegar a la universidad de familias de escasos recursos económicos, dos mil 400 pesos mensuales para que terminen su carrera.

Los jóvenes que no están estudiando y no tienen empleo, todos van a ser contratados en un programa que se llama Jóvenes Construyendo el Futuro y van a trabajar de aprendices, ya sea con maestros mecánicos, con maestros electricistas, con comerciantes, en el campo, en las artesanías y se les va a estar pagando tres mil 600 pesos mensuales mientras se capacitan para el trabajo.

Lo que queremos es que no se quede un joven, un solo joven sin estudio y sin trabajo, porque es mil veces mejor, un millón de veces mejor tener a los jóvenes estudiando o trabajando que tenerlos en la calle, todos los jóvenes van a tener su trabajo, nunca más se le va a dar la espalda a los jóvenes.

También vamos a seguir apoyando el campo, se va a rescatar al campo del abandono, ese programa que consistía en apoyar a los campesinos, el Procampo, continúa, ahora es Producción para el Bienestar.

Y se va a ampliar ese programa, le va a llegar a más gente y sobre todo a los pequeños productores, sean comuneros, ejidatarios o pequeños propietarios, porque el Procampo lo recibían con más ventaja los grandes propietarios, ahora van a recibir más recursos los pequeños.

Y ya va a haber también ese programa de Producción para el Bienestar para que los que se dedican al cultivo del café, viene un programa especial.

Hay otro programa que yo quiero que aquí, en esta región de Margaritas, de Chiapas, y qué bien que están de ejidos, que se sepa y que se extienda. Es un programa que se llama Sembrando Vida. Les voy a explicar en qué consiste.

El que tiene su parcela, ya sea que es ejidatario, pequeño propietario, comunero y quiera sembrar, se les van a dar facilidades.

¿Qué significa este programa?

Que se tienen viveros para producir las plantas, ya sea árboles maderables de acuerdo con la región o frutales, o café, lo que se da en cada región. Se entregan las plantas, pero no sólo es entregar la planta porque ya sabemos que si no hay apoyo queda ahí la planta en el solar, en el patio y nunca se siembra, porque no hay manera de ir a trabajar sembrando.

Bueno, ahora se les va a apoyar con jornales al ejidatario, al pequeño propietario. Ahora ya en Chiapas ya son 200 mil hectáreas que estamos sembrando de árboles maderables y frutales.

¿Saben cuántos están trabajando ya?

Ochenta mil que están ganando cinco mil pesos mensuales, 80 mil campesinos.

¿Para cuánto tiempo es este programa?

Para muchos años. Mientras yo esté en la Presidencia van a tener este apoyo. No es crédito, es para que dejen cultivada su parcela y se le deje eso de herencia a los hijos, a las nuevas generaciones.

Entonces, todos los que tienen tierra, aunque sea una pequeña extensión, una hectárea, dos hectáreas, tres hectáreas, al programa y trabaja el ejidatario y puede trabajar también el hijo.

¿Por qué queremos esto? ¿Por qué estamos haciendo este programa?

Porque queremos que el mexicano ya no tenga que irse a buscar la vida a otras partes.

Lo que queremos es que el mexicano pueda trabajar y ser feliz donde nació, donde están sus familiares, donde están sus costumbres, donde están sus culturas.

Cuando se abandona el campo y no hay manera de tener ingresos, de buscarse la vida, la gente se ve obligada a emigrar.

Esto ha pasado en Chiapas y ha pasado en todo México. Muchos se han tenido que ir a buscarse la vida a otras partes arriesgándolo para buscar algo que mitigue su hambre y su pobreza.

Hay de Chiapas y de México millones de mexicanos en Estados Unidos. Y miren lo que son las cosas, esa gente que se fue por necesidad, ahora son como nuestros héroes.

¿Saben cuánto están enviando a sus familiares de remesas? Treinta y cinco mil millones de dólares. Eso que envían nuestros paisanos a sus familiares, es la principal fuente de ingresos que tiene nuestro país. Merecen un aplauso, verdad, los migrantes.

Pero ya no queremos eso, queremos que la gente tenga trabajo en sus lugares de origen. Por eso es este programa Sembrando Vida.

Ya hice el compromiso de que va a visitar la región, la zona. La secretaria de Bienestar, antes era la Secretaría de Desarrollo Social, ahora es Secretaría de Bienestar, María Luis Albores es la secretaria, es ingeniera agrónoma, es chiapaneca, es de Ocosingo, conoce bien el trabajo de campo, ha estado trabajando en cooperativas con productores, campesinos y ella va a venir hasta acá para explicarles y para que los que quieran participar en este programa, lo puedan hacer.

También hice el compromiso de que va a estar por acá la maestra Raquel Sosa, porque si no es aquí en Guadalupe o en la parte intermedia, cuando menos en Margaritas que haya una universidad pública gratuita para los estudiantes.

Bueno, ya terminé con esto, porque tengo que aprovechar, ya estamos aquí, informarles de todos los programas, hay otros programas.

Decirles que van a cambiar las cosas, que van a llegar todos los apoyos, pero informarles para que ustedes tengan conocimiento y me ayuden para que se haga realidad, porque digo siempre que es como un elefante, el gobierno, pero un elefante reumático y mañoso que no camina, que es un cuerpo de avance lento y hay que estarlo empujando.

¿Me van a ayudar ustedes a empujar el elefante?

Eso es. Porque esa es la democracia, gobierno del pueblo, para el pueblo y con el pueblo. Entonces, todos a trabajar.

Por eso estoy aquí, en Guadalupe Tepeyac, revisando el hospital. No nos quedamos a revisar los hospitales en la Ciudad de México porque allá no están tan mal, allá tienen mejor servicio, allá están los médicos, están los especialistas, no faltan los medicamentos; además, si allá faltan los medicamentos hay protestas, los escuchan, acá si no hay medicamentos, aunque protesten, nunca se sabe nada.

¿No es así?

Entonces, por eso empezamos aquí en lo más marginado. Y ya nada más la visita, pues ya significa… porque ustedes me entienden bien de que le tienen que echar ganas los encargados, que ahí viene el presidente, pues a lo mejor hasta pintan. ¿Creen que no me doy cuenta?

Pero no es ponerle tache al director del hospital, al contrario, es un buen director y todo el personal médico y las enfermeras y auxiliares de todo el sistema de IMSS-Bienestar. Un aplauso para ellas y para ellos.

Pero miren, como yo ya llevo tantos años en estas luchas, pues ya sé de cómo se simula, de cómo se pretende engañar, pero yo no tengo la cara ¿verdad? No me van a ver la cara a mí, eso sí se los aseguro.

Hay una película que -a lo mejor quienes hacen trabajo comunitario, la deberían de pasar en las comunidades de cómo era el sistema anterior, la diferencia de antes, y lo que queremos que sea la nueva realidad- una película que se llama Calzonzin inspector, que es de un buen actor, creo que es Araujo, y se trata que llega a un pueblo el inspector y empiezan a correr el rumor que había llegado el inspector y entonces a arreglar todo porque tenían que entregar buenas cuentas.

Y había un hospital y a pintar el hospital, pero no había enfermos, entonces, ¿cómo le hacemos si no hay enfermos porque no hay camas, no hay equipo?, entonces, había un gimnasio donde hacían pesas unos fortachones, y llevan al hospital a los fortachones, los ponen en las camas: ‘Aquí están los enfermos, todos muy sanos, miren’.

Entonces, así era antes. Hay una historia de este hospital parecida, que cuando lo inauguraron vinieron, cortaron el listón y se fueron, y quedó vacío. Entonces, no queremos ya esa simulación, va en serio. Y sabemos nosotros que podemos contar con el personal médico, que podemos contar con este programa que surgió hace 40 años.

Les voy a decir por qué tengo esta información. Porque yo era director en ese entonces del Instituto Nacional Indigenista en Tabasco, y era yo director de Coplamar, y hace 40 años se creó este sistema las unidades médicas rurales, y los hospitales, desde hace 40 años, 1979.

Claro que primero era IMSS-Coplamar, luego IMSS-Solidaridad, IMSS-Oportunidades, IMSS-Prospera y ahora es IMSS-Bienestar, pero es el mismo sistema que ha cambiado de nombre cada sexenio.

Nosotros lo que queremos ahora es que mejore el servicio en general en cuatro aspectos.

Vengo acompañado de todos los responsables del sector salud del gobierno federal que son gentes serias, profesionales, honestas quienes me están ayudando, tanto el doctor Jorge Alcocer, que es el secretario de Salud del gobierno; como un paisano de ustedes, Zoé Robledo que acaba de ser nombrado director del Seguro Social.

Está también aquí el director del Issste, están los funcionarios de la Secretaría de Hacienda.

Los invité a todos, porque no es lo mismo allá en la oficina en México que acá en el terreno, porque aquí es donde vamos a tomar decisiones.

No son las normas que ya están establecidas. No, primero la realidad.

¿Cómo está la situación y qué es lo que vamos a llevar a cabo?

Son cuatro acciones para mejorar los servicios de atención a le gente.

Primero. Que no falten las medicinas en unidades médicas, en centros de salud, en hospitales, que no falte la medicina.

No es que: ‘Tengo 70, 80, 90, 95 por ciento de abasto de medicamento’, porque no es así, no me estoy chupando el dedo, no es así, faltan medicinas y lo que queremos es que eso se resuelva, que no falten los medicamentos y que no sólo sea el llamado cuadro básico, sino todos los medicamentos que se necesiten para garantizar el derecho del pueblo a la salud.

Ese es un planteamiento: Medicamentos y materiales de curación al 100.

Segundo. Médicos y enfermeras que sean suficientes, porque faltan enfermeras, faltan médicos generales, familiares y especialistas que no quieren trabajar en las comunidades más apartadas.

Entonces, tenemos que buscar la manera, la forma de resolver de que no falten las enfermeras, los médicos y los especialistas, que el que quiera como especialista trabajar en Guadalupe Tepeyac, si así se considera necesario, que gane más, porque va a estar aquí, no va a estar nada más en Comitán, si no aquí va a ganar más que el que está con la misma especialidad en Comitán, porque aquí es donde más se requiere.

Y si faltan médicos, porque con este sistema que se creó llamado neoliberal se dejó de recibir a estudiantes en las escuelas de medicina. Y puede ser que falten médicos, pues ahora vamos a tener que apoyar las escuelas de medicina para que haya médicos suficientes. Eso es lo segundo.

Lo tercero. Mejorar las instalaciones, estas unidades médicas rurales. Les dije, ya expliqué que se hicieron hace 40 años, hay unas, porque se hicieron además con materiales prefabricados, algunas, puede ser que todavía estén así.

Entonces, se requiere darles mantenimiento a unidades territoriales, médicas territoriales y a los hospitales. Entonces, eso es lo tercero.

Y lo cuarto. Regularizar la situación de los trabajadores de la salud, porque hay muchos que están contratados por honorarios o eventuales. Vamos a basificarlos, nos va a llevar tiempo, pero lo vamos a resolver, es un compromiso que estoy haciendo con ustedes.

Esas son las cuatro cosas.

Miren, ya me piqué y todavía tenemos que ir, ya les dije, Altamirano y hasta Ocosingo, y llegamos a dormir a San Cristóbal, pero ya termino. Ya nada más decirles que no les voy a fallar. Vengo de una lucha de muchos años, con mucha gente que sufrió para que se lograra este triunfo y no vamos a quedarle mal a la gente, vamos a estar a la altura de las circunstancias.

No se van a ustedes a arrepentir, se los aseguro. Va a haber una transformación, la Cuarta Transformación de la vida pública de México.

Conocí Guadalupe Tepeyac hace 25 años porque vine la primera vez en 1994, cuando el levantamiento zapatista, cuando el movimiento zapatista, vine aquí, 1994. Ya pasó tiempo. Luego regresé como dos o tres años después, porque se tensaron mucho las cosas y hubo un momento en que estuvo a punto de reiniciar la confrontación armada, y vine acompañando al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas para que se optara por la paz, que a nadie convenía la violencia y la confrontación. Esa fue la segunda vez.

¿Qué tengo que decir acerca del movimiento zapatista?

Que respetamos mucho ese movimiento, podemos tener diferencias, pero somos respetuosos. En su momento ese movimiento aportó bastante para que se conociera esta realidad. Yo les he comentado que antes de eso yo ya estaba trabajando en comunidades indígenas, yo trabajé seis años en la región indígena chontal, maya chontal de Tabasco, yo ya sabía de la realidad de los pueblos indígenas de México, pero muchos no.

Entonces, cuando se da este levantamiento muchos voltean a ver a las comunidades y esto ayuda para que se conociera una realidad de abandono, de opresión, de injusticias, de marginación.

Por eso es que se mejoraron algunos caminos después, porque surgió ese movimiento.

Pasaron los años, nosotros decidimos luchar por la vía pacífica y por la vía electoral. Hay la visión de que se puede transformar de dos maneras una realidad de opresión.

Una forma es por la vía armada, como lo hicieron nuestros antepasados, en la Independencia, la Reforma, la Revolución. Fueron movimientos armados en las tres transformaciones anteriores. Esa es una forma de transformar cuando hay injusticias, cuando hay opresión es llamar al pueblo a tomar las armas, lo hizo Madero, lo hicieron otros.

Nosotros, en mi caso pensamos -y esa fue nuestra apuesta- que se podía transformar sin la confrontación, sin la violencia, por la vía pacífica y por la vía electoral a pesar de los pesares, porque participamos en elecciones y nos robaban las elecciones, había fraude.

Estaban los dados cargados, las cartas estaban marcadas, pero aun así nunca dejamos de insistir en las elecciones, porque sabíamos que iba a llegar el momento en que la gente iba a tomar conciencia y que ya no les iba a servir ninguna trampa, ni el reparto de despensas, ni la compra del voto, ni la entrega del frijol con gorgojo.

Y así llegamos.

Por eso se triunfó porque fue mucho tiempo de lucha, fuimos perseverantes, tercos, hasta lograr esta transformación.

Por eso respetamos mucho al movimiento zapatista y mi recomendación fraterna, respetuosa, es de que no nos peleemos, de que ya basta de divisiones, que necesitamos unirnos todos, como esa estrofa del himno de Chiapas.

¿Quién me la recuerda?

‘Que se acabe la odiosa venganza, que termine por siempre el rencor, que una sea nuestra única esperanza, nuestra sola esperanza y uno también nuestro amor’.

Todos juntos, unidos como hermanos, respetándonos, que haya libertades plenas, completas, que nos respetemos, que cada quien tenga su religión y que se le respete, que se respete la libertad de creencia, que se respete la libertad de pensamiento, la diversidad, que seamos, no tolerantes, respetuosos de todos y que nos hermanemos.

La verdadera felicidad no es acumular bienes materiales, riquezas, la verdadera felicidad es estar bien con uno mismo, estar bien con nuestra consciencia y estar bien con el prójimo, esa es la verdadera felicidad.

Me dio mucho gusto estar aquí con ustedes.

¡Que viva Guadalupe Tepeyac!

¡Que viva Chiapas!

¡Viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

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