La obesidad infantil es uno de los problemas de salud pública más graves del siglo XXI. El problema es mundial y está afectando progresivamente a muchos países.

Los niños y niñas con sobrepeso y obesidad tienden a seguir siendo obesos en la edad adulta y tienen más probabilidades de padecer enfermedades crónico degenerativas como la diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares, a edades más tempranas.

México tiene la incidencia más alta de obesidad juvenil en todo el mundo con más de 28% de los niños entre 5 y 9 años de edad y 38% de jóvenes de entre 10-19 años de edad, clasificados con sobrepeso u obesidad, y las personas que presentan algún grado de desnutrición son las que se están convirtiendo en obesos.

Hace sólo 40 años las principales causas de muerte eran la malnutrición y las enfermedades infecciosas, ahora son las afecciones del corazón y la diabetes, relacionadas con la obesidad.

PARA LAS Y LOS NIÑOS EN EDAD ESCOLAR Y LOS ADOLESCENTES DEBE TOMARSE EN CUENTA:

★ Limitar la ingestión energética procedente de grasas y azúcares;

★ Aumentar el consumo de frutas y verduras, leguminosas, cereales integrales y frutos secos

★ Evitar los alimentos con grandes cantidades de azúcar, grasa y sal durante la infancia. Es mejor que el niño desarrolle un gusto por las comidas más saludables.

★ Realizar por lo menos 60 minutos al día de actividad física.

FACTORES QUE CONTRIBUYEN A AGRAVAR EL PROBLEMA

  • La diabetes gestacional (se presenta en el embarazo) puede dar lugar a un mayor peso al nacer y aumentar el riesgo de obesidad en el futuro.
  • La falta de información acerca de alimentos saludables para los lactantes y los niños pequeños, que es crucial para las preferencias de alimentación que se establecen a edad temprana.
  • La promoción masiva de alimentos y bebidas hipercalóricos para los niños y las familias. En algunas sociedades, ciertas pautas culturales muy arraigadas, pueden alentar a las familias a sobrealimentar a sus niños.
  • Cada vez se ofrecen menos posibilidades para la actividad física a través de juegos saludables, dado el avance de la era digital. Además, el sobrepeso o la obesidad reducen las oportunidades de los niños para participar en actividades físicas grupales

PREVENCIÓN DE LA OBESIDAD INFANTIL

En el ISSSTE consideramos que el sobrepeso y la obesidad son en gran medida prevenibles, por ello hemos hecho un gran compromiso para definir sus políticas y programas, y difundirlos para abatir este padecimiento. Nuestro objetivo es informar y capacitar a las madres, padres, niñas, niños, y adolescentes para valorar la importancia del consumo de alimentos saludables, con una dieta sana, variada y suficiente, apegada al Plato del Buen Comer; así como la actividad física regular.

CONTROL DE PESO

Una de nuestras prioridades es ofrecer a los niños y jóvenes servicios de control de peso basados en la familia y en el modo de vida, para ello contamos el Programa de Prevención y Regresión del Sobrepeso y Obesidad (PPRESyO) y el Modelo de Manejo Integral de la Diabetes por Etapas (MIDE), así como una estricta política nutricional en nuestras Estancias de Bienestar y Desarrollo Infantil (EBDIs.)

CONSEJOS PRÁCTICOS PARA MANTENER UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE

★ Comer al menos cinco piezas o porciones de frutas y verduras al día aporta la ingesta de fibra suficiente y reduce el riesgo de desarrollar enfermedades no transmisibles.

★ Incluir verduras en todas las comidas.

★ Comer frutas frescas y verduras crudas como aperitivo.

★ Elegir frutas y verduras frescas de temporada, sin excederse en las porciones.

Recuerda, no hay “gordita” ni “gordito” sanos.

POR TU BIENESTAR Y EL DE TU FAMILIA, PROCURA ESTAR INFORMADO PARA PREVENIR Y ERRADICAR LA OBESIDAD.

Acude a tu Clínica Familiar, haz tu cita llamando a ISSSTETel al (55) 4000 1000.