El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) participó en el “Diálogo sobre el Sistema Nacional de Cuidados”, organizado por las Comisiones de Puntos Constitucionales, Estudios Legislativos Segunda y para la Igualdad de Género del Senado de la República. El objetivo fue compartir conocimientos, opiniones y experiencias de personas expertas, funcionarias y legisladoras de México y Uruguay para fortalecer los trabajos de dictaminación de la Minuta con proyecto de decreto que reforma los artículos 4° y 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

De aprobarse estas reformas, México sería el primer país en estar a la vanguardia, al establecer un Sistema Nacional de Cuidados (SNC) a nivel constitucional y constituiría un pilar fundamental para construir un Estado de Bienestar.

En un mundo ideal, los cuidados deberían ser responsabilidad de mujeres y hombres por igual, pero la realidad es muy diferente. En México, el 52% de las mujeres que no trabajan, no lo hacen por tener que dedicar su tiempo de manera exclusiva a las labores del hogar y otro 16% porque no lo tienen permitido (ENADIS, 2017). Por lo anterior, integrar el derecho al cuidado a la Constitución es una forma de reconocer tanto la importancia y el valor del trabajo de cuidado, que se realiza cotidianamente, como el esfuerzo, tiempo y energía que se requiere para realizarlo.

El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado mexicano, Martí Batres Guadarrama, destacó que el tema de los cuidados demanda una intervención institucional con una perspectiva de derechos que implica la participación de hombres, mujeres, familias, empresas y del Estado, lo cual no solo permitirá la incorporación de más mujeres al mercado de trabajo sino un mayor ejercicio de los derechos.

Por su parte, la presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género del Senado, Martha Lucía Micher Camarena dijo que tras la pandemia, México y los demás países del mundo tienen una oportunidad histórica para colocar en el centro, los trabajos de cuidados que han sido invisibilizados y devaluados por un sistema capitalista y heteropatriarcal pese a que son los trabajos que sostienen la vida.

En el intercambio, las y los participantes coincidieron en que construir un sistema de cuidados no es solo un cambio de políticas sino de una sociedad que cuida. En ese sentido, la presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann, refirió que construir un sistema de cuidados es un reto enorme, pero de gran trascendencia y de un profundo cambio social y cultural; “repensar, replantear y reorganizar los cuidados es la próxima revolución feminista”, dijo.

Destacó la importancia de ver los cuidados desde tres aristas: los cuidados como un asunto de derechos humanos y de justicia social; como un factor para la autonomía económica de las mujeres y como la oportunidad de construir espacios de paz y seguridad. “De lo que se trata es de cambiar nuestra idea del cuidado, a una noción de que todos tenemos una responsabilidad”.

Por su parte, la representante de ONU Mujeres en México, Belén Sanz destacó un SNC incrementaría la participación de las mujeres en el empleo en un 22 por ciento; mientras que la fundadora de la Red en Cuidados en México, Jana Vasil’eva destacó que de acuerdo con un estudio de Casique y Castro basados en la Encuesta Nacional de las Relaciones de los Hogares (ENDIREH), si el cuidado fuera un valor público se reduciría considerablemente el riesgo de que las mujeres sufran violencia en un 37% para la emocional; 74% en la física; 60% en la económica y 80% menos riesgo de violencia sexual.

Respecto al análisis de la Minuta con proyecto de decreto de las reformas sobre cuidado, Gasman Zylbermann, sugirió retirar del proyecto como población prioritaria que atenderá el SNC a: “quienes vivan en condiciones de extrema pobreza”, dado que la pobreza es un problema estructural que requiere políticas específicas de las que no puede hacerse responsable un sistema de cuidados, como son las políticas de vivienda, servicios públicos de agua, alcantarillado, luz o drenaje.

En lugar de ello, recomendó establecer que el sistema atenderá a grupos de la población dependiente, a personas que requieren apoyo para realizar las actividades de la vida cotidiana y les permita ser autosuficientes y autónomas. Asimismo, destacó la importancia de incluir a las cuidadoras remuneradas como parte de la población objetivo del sistema.

Sobre esos mismos temas coincidieron el coordinador de Investigación de la Cepal en México, Pablo Yanes Rizo, así como el exsecretario Nacional de Cuidados de Uruguay, Julio Bango y la economista, Lucía Pérez Fragoso.

Por su parte, la experta uruguaya en el tema de cuidados, Patricia Cossani, recomendó que el derecho al cuidado quede claramente establecido en otros artículos de la Constitución en los que se haga referencia a las poblaciones objetivo, por ejemplo, aquellos dirigidos a garantizar la protección infantil, de personas adultas mayores, de personas con discapacidad. Recalcó la importancia de establecer planes de acción sucesivos que garanticen el principio de progresividad y no regresividad de la política de cuidados.

Margarita Garfias de la colectiva “Yo cuido”, destacó que el trabajo de cuidados es un trabajo que se hace de manera precaria, recae en los hogares, en las mujeres y se hace sin los conocimientos necesarios, sin equipo e insumos médicos, por lo que se requiere de una política integral que se construya desde el territorio y que cuente con recursos públicos y sociales suficientes.

En ese sentido, Pablo Yañes recomendó hacer mayor énfasis en la responsabilidad principal que tiene el Estado para dejar atrás servicios de cuidados de carácter familista, altamente feminizados y desmercantilizados. “Se tiene que asegurar el principio de progresividad”, dijo.

Julio Bango, coincidió en ese mismo sentido y recalcó que generar un sistema de cuidados supone construir y trabajar en políticas regulatorias, de implementación de servicios, de promoción de cambio cultural, entre otras que velen por cada una de las poblaciones que atenderá.

Lucía Pérez Fragoso, enfatizó que el Estado debe legislar para que se distribuya el trabajo de cuidado de manera equitativa en la sociedad, “es necesario que asigne responsabilidades a las empresas, a las comunidades, a todos los agentes y que asuman su responsabilidad”, dijo.

En tanto, la profesora-investigadora de El Colegio de México, Edith Pacheco, reiteró que “el derecho al cuidado implica decir quién va a cuidar, dónde y a quién. Es tener en cuenta los servicios y lugares para cuidar, las licencias para cuidar no solo para madres y padres, sino para otras personas”. Aseveró que “el cuidado tiene que estar transversalizado”, debe atravesar por los sectores educativo, de salud, de seguridad social y de muchos otros.

En el diálogo también participó la consejera social de Inmujeres y líder de la Red del Derecho al Cuidado, Eugenia Flores, junto con María Concepción González quienes presentaron los logros de esta red en Zacatecas y reiteraron la importancia de que las organizaciones de la sociedad civil dedicadas al cuidado sean apoyadas.

Para revivir el diálogo visite: https://www.facebook.com/SenadoMexico/videos/456846528876348

El Inmujeres refrenda su compromiso para impulsar la creación del Sistema Nacional de Cuidados sustentado en el marco de los derechos humanos y bajo la responsabilidad del Estado para garantizar la calidad, accesibilidad y suficiencia de los cuidados.