La carga desproporcionada del trabajo doméstico y de cuidados no remunerado realizado por las mujeres y las niñas es un obstáculo para su empoderamiento económico. La asimetría del trabajo de cuidados se ha exacerbado durante esta pandemia y es innegable que perpetúa un desequilibrio de poder que sigue subyugando a las mujeres.

Hoy más que nunca necesitamos de un sistema de cuidados que reduzca y redistribuya las cargas de trabajo no remunerados que tienen las mujeres. Este sistema lo deben de ver los gobiernos de todo el mundo como una inversión y no como un gasto sin retorno.

Así lo expresó la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) en el foro “En el camino hacia la justicia y los derechos económicos: Trabajando por el empoderamiento económico de las mujeres”, realizado en el marco de la 65 Sesión de la Comisión Jurídica y Social de la Mujer (CSW), en el que también participaron representantes de países integrantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Organismos Internacionales y Ministras de Igualdad.

Afirmó que, desde el Inmujeres, la estrategia de recuperación económica durante y después de la pandemia del Covid-19 gira íntegramente en torno a no dejar a ninguna mujer atrás, ni a ninguna fuera y para ello construye la igualdad a través de una perspectiva de género.

“En el INMUJERES hemos elaborado una hoja de ruta en materia de igualdad de género donde nuestros principales objetivos se enfocan en fortalecer la autonomía económica de las mujeres para cerrar las brechas históricas en igualdad, y generar las condiciones para reconocer, reducir y redistribuir el trabajo de cuidados donde se involucrarán las familias, el Estado, la comunidad y el sector privado”, dijo.

Además, destacó la importancia de promover que las mujeres se reincorporen a la economía al ritmo necesario para cerrar las crecientes brechas de desigualdad y asegurar que los trabajos creados no terminen dejando fuera de manera desproporcionada a las mujeres del bienestar. 

Para que las mujeres mexicanas estén en el centro de la recuperación postcovid-19, el Inmujeres crea alianzas para promover la agenda de igualdad y en ese sentido, Gasman refirió que se mantiene un diálogo abierto y permanente con los mecanismos para el adelanto de las mujeres en las entidades federativas, con sociedad civil, organizaciones feministas, representantes de varios países, así como con las oficinas de organizaciones internacionales, tanto las Naciones Unidas como la Organización de Estados Americanos.