11 de mayo, Ciudad de México.-  En su segunda edición, Mujer Exporta MX busca plantear y reconocer las necesidades a las que se han enfrentado las mujeres empresarias en un contexto desafortunado por la pandemia de la covid-19, en donde las mujeres y niñas han sido las más afectadas en los diversos sectores, entre ellos el sector económico.

Desde su planeación y puesta en marcha, esta iniciativa reafirma la voluntad de las mujeres empresarias mexicanas para capacitarse y trabajar de manera conjunta y en comunidad para hacer crecer sus empresas.  

En esta nueva etapa, #MujerExportaMX busca expandir las oportunidades de exportación no solo en el marco del T-MEC con Estados Unidos y Canadá, sino también en los del mercado del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TIPAT), como son Australia, Japón y Nueva Zelandia.

A nivel regional, las mujeres empleadoras siguen siendo un porcentaje muy bajo, apenas 3.5% del empleo femenino total (CEPAL, 2020) y las MiPymes lideradas por mujeres son castigadas en el comercio internacional derivado de los patrones culturales patriarcales y discriminatorios que limitan sus oportunidades comentó la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman.

Por su parte el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera reconoció la gran brecha de desigualdad que existe en el campo laboral entre hombres y mujeres, puesto que tan solo por ser hombre existe mayor probabilidad de estar en el campo laboral con una brecha de 30 puntos porcentuales y eso da una idea de la marginación y discriminación en el sector laboral de las mujeres.

También puntualizó que en 2005 existía un 40% de las mujeres dentro del campo laboral y para el 2019 un 44% “esto significa que vamos avanzando en el camino correcto pero también significa que sigue siendo bajo este crecimiento y debemos crear iniciativas que aceleren este proceso de forma incluyente con las mujeres y niñas de nuestro país.”

En cuestiones de exportación es necesario impulsarlo de manera conjunta desde las instituciones gubernamentales como es la política exterior feminista, así como el financiamiento, pero también trabajar muy de la mano con el sector privado con estrategias incluyentes que ayuden a desaparecer la desigualdad en este campo.

De acuerdo con el estudio de diagnóstico Radiografía de la participación de las mujeres empresarias de la Alianza del Pacífico en el comercio exterior de 1,933 empresarias encuestadas exportan periódicamente. La mitad de las que exportan lo hacen a Estados Unidos y son pocas las que destinan sus exportaciones a Europa y Asia.

Este mismo estudio demuestra que 83% de las empresas exportadoras afirma tener personal capacitado para realizar operaciones de comercio exterior y México tiene el porcentaje más alto, con 93% de las empresas con personal preparado.

Sin embargo, los ponentes concordaron que a pesar de estas ventajas, las mujeres empresarias enfrentan diversas barreras y una de ellas es la falta de información acerca de los créditos y programas que ofrece el gobierno mexicano, lo que implica que solo 4% de las mujeres empresarias han participado en proyectos de ruedas de negocios y un porcentaje muy bajo ha recibido capacitación en materia de exportación. A demás de unas otras problemáticas culturales que son parte del sistema patriarcal.

Por ello es necesario hablar de autonomía económica para las mujeres de forma sostenible e inclusiva sin dejar de lado la importancia de la perspectiva de género y fomentando la participación de las empresarias en este tipo de plataformas que buscan ser parte de la transformación de un sistema económico igualitario.