“El lenguaje es el comienzo para poder actuar en la inclusión”, expresó Leonardo Caracol Farfán, Director y Fundador de Amasperger, durante la Conferencia “El lenguaje de la Inclusión”, organizada por el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) en coordinación con la organización Apapache, apoyo a padres con hijos en espectro autista, AC, impartido a la sociedad civil y a los trabajadores de las diferentes instancias relacionadas en este tema, para fortalecer y socializar la cultura del respeto a la diferencia.  

El activista chileno, reconoció durante su ponencia que la discriminación y exclusión se trata de una práctica cotidiana y arraigada socialmente, casi siempre pasa inadvertida para quienes incurren en ella y aún para quienes la padecen; ya que, el lenguaje crea realidades, es el andamio que sostiene los estereotipos, prejuicios negativos y estigmas, que se transforma en prácticas de injusticia, exclusión y violación de derechos.

En este sentido, explicó “lo que yo comunico y expreso en la forma en que me refiero al otro, puede generar una etiqueta buena o mala y esto hace que defina que la persona quede fuera o dentro de un círculo social”.

La sociedad en la que vivimos y crecimos de alguna manera inculca los mismos prejuicios que hacemos hacia otros grupos vulnerables, que incluso estás prácticas pertenecen al país del que somos originarios, por esta razón, el director de Amasperger indicó “el lenguaje de inclusión es darnos cuenta que somos seres que tendemos a excluir, que incluso es algo “normal”, por ello, la idea es ir contra ese sistema “normal” y cambiar mi visión del otro respetando que no todos somos iguales, pero esto no significa que no tengamos capacidades o valía ante la humanidad”.

Aunado a lo anterior, refirió el asunto de fondo, es cómo vemos a las personas y grupos víctimas de discriminación y que actitud tomamos frente a ellos; “lo esencial es poder eliminar este acto violento de destruir la concepción de que eres dueño de alguien, que el hombre es más que la mujer o que los adultos deben mandar y estar por encima de las niñas y niños”.

La empatía es fundamental para entender que lo que hacemos es incorrecto, y de ahí la importancia de esta conferencia para que las y los asistentes reflexionen acerca de que lo principal es la esencia de las personas que tiene derecho a existir, ser y hacer lo que cada quien quiera con responsabilidad y respeto al otro, es decir “comprender esa diferencia y entender que no soy único, tenemos que pensar, creer, amar y vivir respetando al otro, dejemos de pensar que por no tener una discapacidad o diferencia somos mejores que los demás”.

A través de narraciones y cuentos, Leonardo Caracol, fundador de esta asociación chilena explicó “trato de hacer que la gente se dé cuenta que muchas veces han sido los malos y que han actuado como villanos, en las historias, el personaje principal siempre es diferente y no por eso va a cambiar su valor, al contrario, lo que se modifica es su entorno”.

La niñez son el mejor ejemplo, las niñas y niños no tienden a excluir, nosotros como sociedad les enseñamos a hacer grupos, separar, a diferenciarse, porque actualmente hay un mundo competitivo; pero “esto es lo que debemos transformar, de alguna manera hacer partícipes y sumar a la infancia mexicana en esta dinámica de construir juntos con los que están fuera o a dentro una sociedad mejor”

Finalmente precisó “Lo que trato de enseñar a la gente es que valore y respete, aunque la persona con discapacidad sea diferente, tiene sueños, quiere lograr cosas y que sobre todo dese ser feliz y una palabra o un abrazo es su alegría de vivir”.

Desde la Fundación Amasperger apoya a familias con diagnóstico de espectro autista, para explicar lo que pasan los infantes en esta condición, colaboran para que puedan acceder a centros de apoyo terapéutico, y mediante talleres orientan a madres y padres para evitar la carga emocional que genera el cuidar a sus hijas e hijos en esta situación.