La continuidad de los servicios esenciales de salud como la aplicación de vacunas, detección oportuna de enfermedades, atención a niños, embarazadas, pacientes con enfermedades crónicas o la atención de partos y cirugías programadas, previene y reduce significativamente la morbilidad, discapacidad y muertes prematuras en la población.

Durante la pandemia de COVID-19 la provisión de servicios esenciales se redujo severamente a nivel global. La Organización Mundial de la Salud (OMS) documentó la disrupción de estos servicios de mayo a julio de 2020 en 105 países debido a la pandemia. 

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) implementó medidas para atender la pandemia.  En marzo de 2020, asignó 16 mil 146 camas para pacientes con COVID-19; capacitó a 279 mil profesionales de la salud y puso en marcha acciones para prevenir la transmisión del virus en grupos de alto riesgo. Entre estas acciones estuvieron los Módulos de Atención Respiratoria, el seguimiento telefónico de pacientes y la implementación de recetas electrónicas resurtibles. La priorización a la pandemia causó reducciones importantes en la atención preventiva y curativa.

Por ello, en abril de 2021, el IMSS implementó la Estrategia Nacional para la Recuperación de los Servicios de Salud, que implicó la reconversión de hospitales COVID-19, optimizar la prestación de servicios, implementar jornadas de continuidad durante los fines de semana; la habilitación de consultas virtuales y el fortalecimiento de los servicios preventivos mediante las herramientas digitales de CHKT en Línea, para detectar pacientes con riesgo de diabetes, hipertensión, cáncer de mama y cáncer de próstata.

Esta acción permitió incrementar la prestación de los servicios durante los 27 meses de su implementación. Por ejemplo, las consultas de especialidad, la detección de cáncer de cuello uterino y de mama, así como diabetes superaron los niveles prepandémicos (103%, 112%, 103% y 138%, respectivamente) y las consultas de medicina familiar alcanzaron 97%. 

La experiencia del IMSS de implementar, evaluar y transparentar los avances de la Estrategia Nacional de Recuperación de Servicios puede ser un referente para otros sistemas de salud en el entorno internacional.

El trabajo de investigación que sustenta este análisis es un ejemplo de implementación del Programa de Investigación Traslacional “TRASLADA”, que la Coordinación de Investigación en Salud puso en operación en 2023. Los resultados generaron evidencia científica para la toma de decisiones.

POR: DRA. SVETLANA V. DOUBOVA 

COORDINACIÓN DE INVESTIGACIÓN EN SALUD. UNIDAD DE INVESTIGACIÓN EPIDEMIOLÓGICA Y EN SERVICIOS DE SALUD DEL CENTRO MÉDICO NACIONAL SIGLO XXI