El día 23 de mayo se ha instituido como el Día Mundial del Melanoma Cutáneo con el fin de hacer sensibilizar a la población sobre la importancia de esta enfermedad, de la capacidad que tiene para acabar con la vida de una persona y de la necesidad de detectarla tempranamente para lograr curación.

El melanoma cutáneo es un cáncer que se origina en los melanocitos, que son las células que dan el color a la piel; es el cáncer más agresivo de la piel que tiene la capacidad de invadir ganglios linfáticos y órganos a distancia como pulmón, hígado, etcétera.

La posibilidad de diseminación depende del grosor en el espesor de la piel que tenga el melanoma, a lo cual se le denomina “nivel de Breslow”; a partir de 1mm de espesor la posibilidad de diseminación aumenta considerablemente y la posibilidad de curación disminuye.

La mayoría de los melanomas, contario a lo que la gente cree, se originan “de novo”, es decir, no se originan en lunares pre existentes, solo el 20-30 por ciento se originan en lunares que ya existían, el resto aparecen espontáneamente. Esto implica que, aunque en el proceso de diagnóstico es importante evaluar los lunares, la aparición de cualquier pigmentación en la piel debe de ser consultada.

En México melanoma ocupa alrededor del 3 por ciento de los tumores, desafortunadamente 80 por ciento de los casos en etapas avanzadas, la media de nivel de Breslow en los pacientes atendidos en el Hospital de Oncología del Centro Médico Nacional Siglo SXXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es de 10mm.

Los sitios más frecuentemente afectados son en las extremidades inferiores, por debajo de las uñas de los dedos de pies y en las plantas, se caracterizan por una mancha negra que no desaparece y que aumenta tanto en extensión como en volumen.

Para lograr el diagnóstico temprano se debe identificar la aparición de pigmentación en piel, además, sobre todo las personas con piel blanca y ojos claros, se debe observar si un lunar cambia; los cambios que alertan pueden identificarse con la nemotecnia “ABCDE”: Asimetría de los lunares, Bordes irregulares, cambios de Color o varios colores, aumento del Diámetro y Elevación sobre la superficie de la piel.

El tratamiento del melanoma es esencialmente quirúrgico, retirar el tumor con un margen de piel sana, en los mayores de 1mm de grosor se debe hacer una estadificación ganglionar para descartar metástasis en los ganglios, ya sea con mapeo linfático y resección del primer relevo ganglionar o retirando todos los ganglios de la zona de drenaje.

La posibilidad de curación de esta enfermedad no depende de la magnitud de la cirugía sino de lo temprano que se detecte.

En el IMSS reforzamos el llamado a la prevención de enfermedades, he ahí la importancia de sensibilizar en el Día Mundial del Melanoma Cutáneo.

 

Departamento de Tumores de Cabeza y Cuello

Hospital de Oncología, CMN Siglo XXI del IMSS