El aprovechamiento del pepino de mar está conformando una nueva pesquería con gran potencial de beneficio local y regional en Yucatán.

La Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca), explica que el pepino de mar es un recurso con distribución regional, bien conocido a partir de los estudios del Instituto Nacional de Pesca (Inapesca) y de otras instituciones académicas.

Sin embargo, la Conapesca reitera que su captura debe ser ordenada y controlada, siguiendo criterios de pesca responsable, ya que se trata de especies altamente vulnerables a la pesca y a los cambios ambientales, con largo periodo de vida o longevidad y de mucha importancia en el ecosistema, resultando altamente necesaria la plena conciencia de estas condiciones por parte de todos los usuarios del recurso.

Por lo anterior, la Conapesca, en consideración a lo establecido en la Ley General de Pesca y Acuacultura Sustentables, impulsa un Programa Integral de Aprovechamiento Responsable en el marco del ordenamiento pesquero, con el objetivo de inducir a una captura racional del recurso en esta región, en función de la biomasa disponible, la capacidad de renovación de sus poblaciones y su conservación para mantener su pesca en el largo plazo.

El programa incluye acciones de investigación, regulación, capacitación a buzos y plantas procesadoras, otorgamiento de permisos en función de la disponibilidad del recurso, monitoreo de la producción e inspección y vigilancia, todo ello para garantizar que apliquen las medias administrativas adecuadas.

En esta estrategia de trabajo, es indispensable señalar, que aun cuando la veda de pepino concluye el 31 de enero, no puede pescarse legalmente en tanto no se otorguen los permisos correspondientes, cubriéndose las condiciones que están establecidas por Ley y Reglamento.

Con base en las experiencias previas, se estima que la temporada de pesca no podrá iniciar antes de la segunda quincena de febrero.

Por lo tanto, la Conapesca invita al sector productivo a actuar en apego del marco legal, para evitar con ello sanciones como el decomiso de artes de pesca y producto, así como multas y la imposibilidad del otorgamiento de permisos de pesca.