Esto representa 14 millones de pesos adicionales a lo ejercido en 2016, gracias a la efectividad lograda por el PROPESCA, un apoyo económico directo para pescadores ribereños y de aguas interiores, así como tripulantes de embarcaciones y trabajadores operativos de unidades acuícolas, y cuya actividad se encuentre temporalmente restringida por una Regulación Pesquera Oficial (Acuerdo de Veda, Norma Oficial Mexicana, Zona de refugio) o afectada por una contingencia que perjudiquen de manera drástica su producción y sus ingresos.

Al corresponder a un programa de Fomento a la Producción Pesquera y Acuícola, las personas elegibles deberán asistir a talleres de capacitación en mantenimiento sanitario y seguridad laboral; administración, comercialización o valor agregado;  normatividad pesquera; sanidad y buenas prácticas, o cooperativismo.

El objetivo es que en épocas de baja o nula productividad, los pescadores adquieran conocimientos, capacitación y preparación que les den mejores herramientas para la seguridad de la vida en el mar, para su desarrollo personal, para dar valor agregado a sus capturas y así obtengan mejores ingresos.

A partir de que la documentación sea entregada en las oficinas de CONAPESCA más cercana a la zona de trabajo del productor, se conformarán los primeros grupos de 30 personas como máximo para iniciar con las capacitaciones, las cuales se pretende realizar alrededor de mil 150 cursos, que comenzarán en las primeras semanas de julio para cubrir el total de beneficiarios.