Esta tiene un papel fundamental para el desarrollo de la vida de las Zonas Metropolitanas del Valle de México y de Toluca, en materia de consumo personal, actividades agrícolas, riego e industria. Con el paso del tiempo, se han generado varios cambios en la estructura de ambas zonas: la población ha aumentado (300,000 personas a más de 730,000), por lo que se genera una mayor demanda del agua para mantener el estilo de vida cotidiano en el espectro de acción del Sistema. Debido a esto, el Sistema tiene varios retos que enfrentar para poder seguir cumpliendo con su función en un corto, mediano y largo plazo; por ejemplo la falta de equilibrio en balances hídricos (al mediano plazo se usará más de lo que se produce), la insuficiencia de servicios de agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales, la presión en la infraestructura o la falta de recursos. Como fruto de la cooperación institucional con el Banco Mundial, el Organismo de Cuenca Aguas del Valle de México (OCAVM), el Organismo de Cuenca Balsas, el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) y el Instituto de Ingeniería de la UNAM se elaboró el “Diagnóstico para el manejo integral de las subcuencas Tuxpan, El Bosque, Ixtapan del Oro, Valle de Bravo, Colorines-Chilesdo y Villa Victoria pertenecientes al Sistema Cutzamala”, el cual, de manera eficiente proporciona una visión detallada del Sistema Cutzamala en un enfoque multidisciplinario y sin lugar a duda, generará un marco informativo para la elaboración de futuras políticas alrededor del mismo.
Las recomendaciones emitidas en este diagnóstico, son el resultado de un esfuerzo enorme entre las instituciones ya mencionadas y sus expertos investigadores, así como otras contribuciones, por buscar una mayor eficiencia en una obra de infraestructura de gran importancia para las zonas metropolitanas. Seguramente, esto generará los mecanismos de diálogo y acción fundamentales para continuar moviendo a México hacia el futuro.
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