Ser padre de familia y al mismo tiempo entrenador, es una doble tarea que implica responsabilidad, disciplina, orgullo y sacrificio, así lo describe Jorge Luis Corzo Méndez quien prepara a su hija Odaliz Alexandra Corzo Álamo, medallista mundial de bronce en la pasada Copa Mundial de Boxeo Juvenil que se realizó en Montenegro.
“Estoy muy orgulloso porque está destacando a nivel mundial, además tengo mucha satisfacción porque le estoy cumpliendo su sueño y también a mí, como me hubiera gustado estar en su lugar”, expresó el señor Corzo.
Originario de Sonora, hace equipo con su esposa Lizbeth Álamo Alvarado, quien ha sido su apoyo incondicional para criar sus otros dos hijos: Luis Alejandro y Jorge Alexander Corzo Álamo de 12 y 6 años, respectivamente.
Ambos padres consideran la educación escolar un mérito importante para destacar en el deporte, por ello
Además de ser una gran peleadora, ganó el título en el Continental de Boxeo Juvenil de Colombia, Odaliz Corzo también sobresale como alumna del Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Sonora (CECyTE) de Hermosillo V “Pueblitos”.
“No solo está destacando en el deporte sino también es muy buena estudiante, ha salido seis veces en el cuadro de honor y eso también me enorgullece”, detalló el entrenador de 34 años.
El padre de Odaliz asume los riesgos que corre su hija al practicar un deporte de contacto como el boxeo, por eso sabe que la preparación es fundamental.
“La preocupación siempre va a estar cuando la veo arriba del ring, pero aprendí a trabajar con eso porque en sus primeros combates me bloqueaba y no podía dar indicaciones, con el paso del tiempo me acostumbré y ahora pienso bien. Eso es lo mejor para el atleta que está compitiendo porque los que estamos abajo del cuadrilátero somos el cerebro”, añadió.
