Las políticas públicas en materia de calidad del aire implementadas en los últimos 20 años en la ZMVM contribuyeron a una disminución en la magnitud y frecuencia de los eventos de alta concentración de este contaminante, y actualmente se presentan principalmente entre los meses de mayor radiación solar y alta estabilidad atmosférica.

Para fortalecer la toma de decisiones en materia de calidad del aire, además de los datos del inventario de emisiones y de las mediciones registradas de manera continua en las 32* estaciones automáticas de monitoreo atmosférico ubicadas en la ZMVM, como parte de la vigilancia de los daños a la salud asociados a la contaminación atmosférica, la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, a través de la Dirección General de Epidemiología, fortaleció 200 unidades centinela que son hospitales y clínicas públicas que van registrando diariamente 14 padecimientos trazadores que están vinculados con los efectos a la salud por exposición a concentraciones altas de ozono y partículas PM10, a través del Sistema Único Automatizado para la Vigilancia Epidemiológica (SUAVE), que capta la información de todas las unidades del Sector Salud.

Derivado de los registros de mayo de 2016, el SUAVE ha identificado que la demanda de consultas se incrementa en la misma tendencia que presenta el comportamiento de los niveles de ozono.

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Fuente: Datos de la Dirección General de Epidemiología de la SSA

Para presentar el pronóstico de la temporada de ozono 2018, que abarca de febrero a junio, se integró un grupo interinstitucional de expertos en Meteorología y de Calidad del Aire de las Secretarías del Medio Ambiente de la Ciudad de México y del Estado de México, así como de la CONAGUA a través del Servicio Meteorológico Nacional para analizar y discutir el resultado de los modelos meteorológicos, con el propósito de determinar sus implicaciones en la calidad del aire para la ZMVM, que comprende el territorio de la CDMX y 18 municipios del Estado de México.

A pesar de que en las dos últimas semanas se tuvo el ingreso al centro del país de los frentes fríos 22 y 23 que vinieron acompañados de intensas masas de aire polar continental, provocando temperaturas muy frías en el Valle de México; los registros de temperatura de lo que va de este invierno, muestran que ha sido seco y menos frío que el promedio. Se pronostica que en la ZMVM llueva menos de lo habitual en febrero, con acumulados menores a 20 mm. Para marzo acumulados de lluvia en el rango normal menor a 30 mm. Para abril se esperan lluvias por arriba de lo normal. En esta región, la lluvia acumulada de enero a abril representa el 7.5% de la lluvia anual, por lo que se consideran a estos meses como los más secos del año.

El promedio de enero a abril de la temperatura máxima en la región es respectivamente 22.4, 23.9, 25.9 y 27.2 ˚C. La mayor insolación del periodo de enero a marzo es respectivamente de 240, 234 y 268 horas totales por mes lo que significa el trimestre con mayor incidencia de rayos solares.

En febrero y marzo las condiciones meteorológicas en la ZMVM son aún influenciadas por la época invernal, dominadas por el paso de los frentes fríos y las masas de aire polar con efectos de temperatura de templadas a frescas y vientos dominantes del norte y noreste, provocando cielos despejados por la alta presión asociada a las masas de aire frío y estabilidad matutina y vespertina, con mayor cantidad de inversiones térmicas.

En marzo la época de transición a la primavera el viento es débil y variable, dominando un patrón de circulación estable y se incrementa el ambiente seco con vientos débiles y mayor número de días con inversiones térmicas.

Por lo anterior y de acuerdo con los registros del Observatorio de Tacubaya del SMN, se espera que las condiciones que han prevalecido durante la temporada invernal tengan un impacto en un mayor número de incendios forestales dentro y en los alrededores de la cuenca. Es importante mencionar que, bajo ciertas condiciones meteorológicas, los incendios forestales podrían ser una fuente de contaminantes que puede afectar la calidad del aire de la ZMVM.

De acuerdo con las previsiones de calidad del aire, se espera que durante la temporada de ozono 2018 (15 de febrero a 15 de junio) se presenten entre 10 a 15 días con concentraciones máximas, iguales o superiores a 155 ppb (151 puntos IMECA). No se descarta la presencia de al menos un episodio de contingencia por ozono durante el mes de febrero. Este pronóstico se actualizará a medida que se cuente con mayor información sobre el comportamiento de los fenómenos meteorológicos.

Es importante mencionar que la presencia del ozono (O3) troposférico en la Zona Metropolitana del Valle de México depende de diversos factores que incluyen: la cantidad y composición de sus precursores, las condiciones de estabilidad atmosférica, la temperatura ambiente y la radiación solar, entre otros. Las políticas implementadas en los últimos 20 años contribuyeron a una disminución en la magnitud y frecuencia de los eventos de alta concentración de este contaminante, y actualmente se presentan principalmente entre los meses de mayor radiación solar y estabilidad atmosférica.

 

Por Martín Alberto Gutiérrez Lacayo, Coordinador Ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (publicado en Revista Nuestro Ambiente Núm. 9 / Enero 29 de 2018).

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* fuente SEDEMA-CDMX - estaciones de monitoreo del SIMAT, ubicadas en la ZMVM.