El sistema financiero mexicano cuenta con la figura de Corresponsales Bancarios, que tiene la finalidad de incentivar el incremento de puntos de distribución de servicios financieros.

Los Corresponsales Bancarios representa una alternativa flexible, de alta penetración y bajo costo para el que ofrece los servicios financieros, en beneficio del usuario final.

Esta figura promueve la competencia entre bancos al permitir realizar transacciones bancarias sobre cuentas de depósito, desde los establecimientos comerciales contratados como corresponsales bancarios.

Además de facilitar el ofrecimiento de servicios financieros a segmentos de la población y zonas geográficas que hasta hoy carecen de ellos.