Entre las principales afectaciones están: 

  • Las plantas y árboles quedan más desprotegidos ante plagas y enfermedades. Se daña su capacidad de crecimiento.
  • Se reduce el valor recreativo de las zonas siniestradas, los suelos modifican sus propiedades e incrementa la erosión.
  • La mayoría de los incendios forestales abarcan, en promedio, superficies igual o mayor a cinco hectáreas y duran al menos un día.

Más información en Comisión Nacional Forestal