La lluvia es el principal factor que detona deslizamientos de tierra en México, pero también la deforestación y las fugas de agua.
El agua tiene un doble efecto en la inestabilidad de laderas:
- Aumenta el peso del material.
- Disminuye la resistencia del suelo y lo hace más blando.
Cuando llueve, parte del agua se infiltra en el suelo y otra, escurre. A mayor duración y más cantidad de lluvia, mayor infiltración.
Si vives en la orilla de una barranca, en la ladera de una montaña, en la cima de un cerro, en el cauce de un río o en la desembocadura de una barranca:
- Evita las fugas y que el agua de tu patio o de las azoteas caiga directamente en el terreno.
- ¡No destruyas la vegetación!
La vegetación es un agente natural que ayuda a disminuir la probabilidad de inestabilidad de laderas, debido a que reduce el impacto de las gotas de lluvia (previene la erosión) y absorbe parte del agua que se infiltra en el subsuelo.
Señales de un deslizamiento:
- Grietas
- Hundimientos
- Brotes de agua
- Deformaciones en banquetas, bardas, pisos y muros
- Ruidos y vibraciones
Permanece alerta:
- Respeta el uso de suelo y los reglamentos de construcción.
- Identifica los refugios y organiza un plan de evacuación junto con tu familia y las autoridades de Protección Civil de tu comunidad.
