Del 5 al 8 de marzo se celebró en Jamaica la 35 Conferencia Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), para América Latina y el Caribe. México participó en este evento a través de una delegación integrada por Agustín García López, Director General de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), quien fungió como representante del Canciller Luis Videgaray Caso; Ignacio Lastra Marín, Subsecretario de Alimentación y Competitividad de la de la Secretaria de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA); Martha Bárcena Coqui, Representante Permanente de México ante los Organismos de las Naciones Unidas con sede en Roma; y Mario Arriola, Representante Alterno en dicha Representación de México.

En el marco de esta Conferencia, el Emb. Agustín García López, resaltó el trabajo y la excelente relación que mantiene la AMEXCID y la FAO, fundamental para la movilización de recursos para financiar proyectos enfocados a fortalecer las capacidades de países Caribeños en materia de resiliencia a los desastres naturales, atención a las vulnerabilidades y cambio climático, como lo es la Estrategia de Gestión Integral de Riesgos de Desastres México-CARICOM.

En esta misma línea, también el titular de la AMEXCID destacó que el apoyo de la FAO al Programa Mesoamérica sin Hambre, iniciativa emblemática de la cooperación regional financiada e impulsada por México, ha sido fundamental para garantizar acciones que fortalezcan la Seguridad Alimentaria y Nutricional, así como la Agricultura Familiar, a fin de avanzar exitosamente hacia la erradicación del hambre en Centroamérica, Colombia y República Dominicana.

Al respecto, Martha Bárcena destacó la disposición de México para continuar colaborando con la FAO a fin de dar continuidad del programa Mesoamérica sin Hambre, a través de una segunda etapa que ampliaría su marco de acción a la lucha contra el cambio climático,  la sustentabilidad ambiental y en áreas afectadas por sequía en el Corredor Seco Centroamericano que son territorios de origen de migrantes.

Por su parte, el Subsecretario Lastra presentó el informe sobre los resultados alcanzados durante el periodo de la anterior 34° Conferencia de la FAO que tuvo lugar en la Ciudad de México, en marzo de 2016, e hizo entrega de la presidencia de esta Conferencia al Gobierno de Jamaica. También anunció un proyecto de cooperación en investigación de los recursos pesqueros, a través de capacitación en el buque de investigación pesquera y oceanográfica “Dr. Jorge Carranza Fraser”, del Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura (INAPESCA), en su trayecto entre el Atlántico y el Pacifico en el 2018.

En este sentido, durante la Conferencia México y FAO firmaron la Carta de Intención para el establecimiento del Fondo México-FAO-CARICOM, con el propósito de promover la adaptación al cambio climático de los sistemas agroalimentarios y la resiliencia de los medios de vida de la población rural de los países del Caribe.

Finalmente, la 35° Conferencia ratificó su mandato a la FAO para continuar trabajando en los próximos años sobre los siguientes tres temas que fueron aprobados en la 34° Conferencia: poner fin al hambre y erradicar todas las formas de malnutrición; hacia una agenda transformadora del desarrollo rural sostenible; y agricultura sostenible y resiliente al cambio climático. También acordó incluir en sus trabajos futuros, asuntos como la relación entre migración y seguridad alimentaria, preservación de la biodiversidad en la agricultura y acceso al financiamiento verde y concentrar sus esfuerzos en los territorios más rezagados de la región, todo ello con el fin de alcanzar los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

Los países de la región solicitaron a la FAO prestar apoyo a los gobiernos, con el fin de elaborar y fortalecer estrategias integrales para la erradicación del hambre y la pobreza rural, tomando en cuenta el empleo y emprendimiento de los jóvenes, las mujeres y los grupos indígenas con vistas a la revitalización económica y social de las zonas rurales. Asimismo, solicitaron al organismo internacional su apoyo para enfrentar las causas de la migración debido a la inseguridad alimentaria y la falta de oportunidades, y para impulsar el papel de la pesca y la acuicultura, especialmente la pesca artesanal, y de esta forma favorecer la erradicación de la pobreza el hambre y la malnutrición.