Entre ellos se encuentra el Archivo de comerciantes, 1757 a 1850, preservado por la Biblioteca Francisco Xavier Clavigero, de la Universidad Iberoamericana (UIA). La maestra María de Jesús Díaz de la UIA, quien ha estudiado este manuscrito, detalló que se trata de un fondo documental formado por diferentes expedientes de comerciantes de Nueva España, que integraban el Consulado de la Ciudad de México, entre ellos el almacenero Francisco Ignacio de Yraeta y Azcárate. Los expedientes cuentan con duplos en formato de microfilm y digitalización, los cuales están a disposición de los investigadores.
El Códice de Cuaxicala, preservado por la comunidad de Cuaxicala, municipio de Huauchinango, fue otro de los registros catalogados como Memoria del Mundo de México y es ejemplo de las directrices del Programa Memoria del Mundo MOW: “Reconocer el patrimonio documental de culturas étnicas existentes dentro de las naciones”. El historiador Guillermo Garrido Cruz, quien ha velado por el códice, comentó que uno de los motivos por el cual se gestionó su registro fue asegurar su preservación, en manos de la comunidad de Cuaxicala, ante las amenazas sobre el manuscrito pictográfico náhuatl escrito en piel, que data de mediados del siglo XVI. En su contenido se registra la historia de la región de Huauchinango-Xicotepec, tanto antes como después del contacto con los españoles. También tiene un alto valor estético al tener sofisticados glifos nahuas y en otras lenguas indígenas.
La Colección de la Biblioteca de Fray Francisco Burgoa, de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (BFB-UABJO), igualmente obtuvo su registro. David A. Karminski Katz, coordinador administrativo de la BFB-UABJO, aclaró que éste se compone de 30 mil libros que datan del siglo XV hasta principios del siglo XX. En ella se conservan el pasado de diversas bibliotecas conventuales, que a partir de la desamortización de bienes pasaron al Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca, antecedente de la UABJO, del cual también se conserva su antiguo fondo universitario. Asimismo, guarda el legado de personas ilustres que decidieron donar sus bibliotecas personales, tal fue el caso de Benito Juárez Maza, hijo del presidente Juárez. Entre la amplía cantidad de títulos irremplazables que contiene la colección se figuran once incunables (libros impreso entre el momento en que Gutenberg inventa la imprenta de tipos móviles (1450-1454) y el 31 de diciembre de 1500). Uno de los compromisos de la biblioteca es lograr el acceso a toda persona interesada, por lo cual algunos libros pueden ser consultados en la página Primeros Libros.
El Centro de Estudios de Historia de México Carso (CEHM) de la Fundación Slim, obtuvo su registró por Los archivos de Pedro Vargas, Dolores del Río y Roberto Montenegro: Tres tesoros de la cultura popular mexicana dentro del MOW de México. La intención, comentó Manuel Ramos Medina, director del CEHM, es dar reconocimiento a dichos fondos documentales, como legado de tres populares figuras que siguen presentes dentro de la sociedad mexicana. Parte de la documentación puede ser consultada en la página del CEHM, recordando el director que la difusión es fundamental, puesto que un archivo que no se consulta es un archivo muerto.
El Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca, trabajó para dar registro a la Colección de expedientes en lenguas indígenas de Teposcolula y Villa Alta (1570-1816), la cual se compone de 305 documentos escritos en lengua zapoteca y mixteca, entre ellos un testamento escrito en mixteco; un pedimento escrito en náhuatl y un censo del pueblo de San Juan Yalahui, escrito en zapoteco; entre otros. Javier Cervantes Bravo, director del Archivo Histórico del TSJEO expresó que uno de los trabajos del archivo, a partir del reconocimiento otorgado por la UNESCO, ha sido la difusión. Para su preservación, se enviará la colección a la Ciudad de los Archivos, lugar apto para albergar el patrimonio documental de Oaxaca.
Los Tratados y acuerdos internacionales suscritos por México, 1823-2016, que fueron registrados por la Secretaría de Relaciones Exteriores, tienen vinculación con otra de las directrices del Programa: “Nada queda fuera de él por ser demasiado antiguo o demasiado nuevo”. Agustín Colín Huitrón, del Acervo Histórico Diplomático, comentó que entre los documentos sobresalientes se encuentran el Tratado de Unión, Liga y Confederación, por ser el primer convenio que suscribió México como nación independiente en 1823; así como el Tratado para la Proscripción de Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, que se encuentra registrado como MOWLAC. Todos estos pactos, que vislumbran la relación bilateral de México con el mundo, se mantienen en condiciones óptimas dentro de la Bóveda de Tratados, en la cual se van incorporando nuevos documentos año con año.
Por su parte, el Archivo Histórico de la Secretaría de Salud registró el Fondo documental Beneficencia Pública, 1753-1945. Irma Betanzos Cervantes, jefa del Departamento de Archivos de Concentración e Histórico de la Secretaría de Salud, compartió información sobre el interesante contenido del acervo, señalando que tanto los impresos como los manuscritos son representativos de la etapa de la administración de Benito Juárez García, quien dio forma a la Institución de la Beneficencia Pública, como consecuencia de las Leyes de Reforma. Resaltó además que es uno de los fondos más consultados por los investigadores.
La Credencial para votar en México, 1949-1992, ameritó su registro, dado su valor simbólico, ya que el documento es considerado como patrimonio moderno en una serie de diez archivos de identificación ciudadana, desde 1949 hasta 1992. Además, es testimonio del clima histórico social, de las circunstancias de su tiempo y recoge momentos de gran importancia para el país, como cuando la mujer fue reconocida como ciudadana con derecho a votar.
El Archivo Histórico de la Parroquia San Juan Bautista de Tolcayuca, Hidalgo, también se incorporó al Programa. Su director, Samuel Juárez Romero, expresó que es muy satisfactorio trabajar en el archivo parroquial, cuyo contenido es tan amplio como la historia de la comunidad de Tolcayuca. El acervo se conforma por siete mil expedientes, siendo el padrón de la población de 1646 el documento de mayor antigüedad que se conserva en el templo.
Los Estudios Churubusco (Echasa), gestionó el registró de las Grabaciones originales de música compuesta específicamente para el cine mexicano entre 1958 y 1975, como una manera de reconocer a los grandes compositores e intérpretes que participaron en el auge de la Época de oro, del cine mexicano. Este fondo contiene cintas de grabaciones originales de compositores, entre los que se encuentran Manuel Esperón, Antonio Díaz Conde y Joaquín Gutiérrez Heras; y las interpretaciones de Pedro Vargas, Lucha Villa, Agustín Lara y otros tantos talentos. Carlos García Agraz director general de Echasa, subrayó que el reconocimiento del acervo sonoro cinematográfico como Memoria del Mundo es de suma importancia, no solamente para ayudar a su rescate y preservación, sino también para permitir su difusión a investigadores y público en general.
El Archivo Histórico de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) obtuvo el registro de 240 mil expedientes y 80 mil planos al programa MOW de México. El Patrimonio documental sobre la historia del agua en México, 1558-1990, estructurado en siete fondos, se conforma por documentos originales, que dan testimonio de los usos oficiales y cotidianos del agua en México a lo largo de cuatro siglos. Conviene subrayar que este acervo forma parte de la Red Iberoamericana de Archivos del Agua.
Es de aclararse que el Lienzo de Quauhquechollan, también fue inscrito y reconocido en el MOW de México, aparte de su registro regional MOWLAC.
