Oriundo del estado de Jalisco, el General Donato Guerra se distinguió por ser un abnegado patriota y honorable militar que participó en la defensa de la nación durante la Segunda Intervención Francesa y anteponer su deber y obligación como militar antes que el interés personal.
Ingresó al Ejército Republicano el 8 de octubre de 1864, con el grado de Capitán de Caballería y ocupó el cargo de Comandante de Escuadrón de la Guardia Nacional bajo las órdenes del General Ramón Corona. Defendió a la patria al combatir a las fuerzas del Imperio de Maximiliano de Habsburgo en los estados de Sinaloa, Jalisco, Nuevo León, Zacatecas. Su prestigio como militar y las victorias obtenidas durante sus campañas, lo encaminaron a la gubernatura de Jalisco el 27 de diciembre de 1866; sin embargo continuó en la defensa de la nación hasta el triunfo de la República sobre el Imperio.
Creyente del voto libre y la no reelección, se adhirió al Plan de la Noria proclamado en 1871 y posteriormente, en 1876 se afilió al Plan de Tuxtepec. El 19 de septiembre de ese mismo año, mientras enfrentaba a las fuerzas defensoras del entonces Presidente de la República Lerdo de Tejada, fue asesinado en el Rancho de Ávalos, ubicado en el estado de Chihuahua.
Su cadáver fue velado en el salón de sesiones del Congreso y sepultado en el panteón de la Regla de la capital chihuahuense. Sin embargo, 20 años más tarde sus restos fueron exhumados y trasladados a la Rotonda de Personas Ilustres, en el Panteón de Dolores de la Ciudad de México, como reconocimiento a su destacada trayectoria militar y su lucha en favor de la soberanía nacional.