El Gobierno de México da la bienvenida a la decisión de un Fiscal Federal para el Distrito de Arizona de presentar cargos penales contra un agente de la Patrulla Fronteriza por la muerte del mexicano José Antonio Elena Rodríguez, ocurrida el 10 de octubre de 2012 en Nogales, Sonora.

Como se recordará, el adolescente se encontraba en territorio mexicano y falleció como consecuencia de los disparos en su contra realizados por el agente Lonnie Swartz, desde territorio estadounidense.

Esta decisión reconoce la legitimidad de la acusación independientemente de la nacionalidad de Jose Antonio Elena y representa un avance sin precedentes en cuanto a la transparencia y rendición de cuentas en las acciones de procuración de justicia y de control migratorio; en particular, aquéllas en las que se recurre de manera desproporcionada al uso de la fuerza letal en contra de sospechosos no armados.

La posibilidad de que la legalidad de las acciones del oficial sean cuestionadas en un juicio, abona a la construcción de confianza de la comunidad en los agentes de control migratorio y en el sistema de justicia de ese país.

El Gobierno de México dará puntual seguimiento al desarrollo del juicio penal y reitera el indeclinable compromiso del Estado mexicano de brindar protección y asistencia consular a sus nacionales.

La Embajada y red de consulados en Estados Unidos seguirán trabajando para asegurar la adecuada representación legal de los connacionales cuyos derechos fundamentales hubiesen sido vulnerados.