En opinión de México, la mejor manera de hacerlo ha sido unirse a la tendencia preexistente, caracterizada por la creación de foros informales innovadores que se basan exclusivamente en la voluntad política de sus miembros (BRICS, CIVETS, EAGLES, etc.) y que están diseñados específicamente para intercambiar puntos de vista de manera regular, con el fin de encontrar cómo hacer frente a los retos actuales de manera colectiva. Con esta idea, en 2013 los Ministros de Relaciones Exteriores de México, Indonesia, la República de Corea, Turquía y Australia decidieron crear MIKTA.

MIKTA es un espacio informal para el diálogo entre sus integrantes, con base en sus coincidencias y su pertenencia a otros foros internacionales como G20 y Naciones Unidas. Como otros grupos de este tipo, MIKTA es un conjunto diverso de países que, no obstante, comparten valores y enfrentan retos similares. Todos son economías abiertas con sistemas democráticos plurales. Los cinco países tienen ubicaciones geográficas estratégicas y están vinculados sólidamente con sus respectivas regiones. MIKTA se basa en el interés común en fortalecer el multilateralismo, apoyar los esfuerzos globales dirigidos hacia la estabilidad y la prosperidad, facilitar soluciones pragmáticas y creativas para problemas regionales y globales, y hacer reformas muy necesarias en las estructuras de la gobernanza global. 

El objetivo fundamental de MIKTA es fortalecer los vínculos bilaterales entre sus miembros, así como impulsar la cooperación y promover la coordinación en temas globales de interés común. Debe subrayarse que los intercambios en el seno del espacio MIKTA son informales, flexibles y se basan en temas específicos, porque no hay un deseo de crear una estructura pesada y engorrosa con una agenda rígida. Durante el poco más de año y medio que lleva funcionando MIKTA, sus miembros han llegado a un consenso amplio en temas como la amenaza nuclear norcoreana, el derribo del vuelo MH17 de Malaysia Airlines y la crisis del ébola y sus repercusiones para la salud global. De igual forma, los Cancilleres de estos cinco países han publicado dos artículos de opinión, con el fin de informar a sus amigos y aliados en el mundo cuáles son sus objetivos generales y producir un debate sobre esta nueva forma de enfrentar retos globales comunes.

MIKTA, como cualquier otra iniciativa nueva, está todavía en construcción. Sin embargo, sus miembros están convencidos de que han dado inicio a algo significativo. Para los cinco miembros, el esfuerzo ya ha rendido frutos, pues han conseguido construir relaciones mucho más cercanas entre ellos que las existentes antes de MIKTA. No obstante, mantienen la esperanza de que este espacio también traiga beneficios importantes para la gobernanza global en general.